Sostienen que
cambiaron la metodología de medición en rubros como la
salud y el
turismo para bajar el índice. Desde el organismo afirman
que
en turismo se tomaron los datos
que figuran en los acuerdos de precios.
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Cedoc
La difusión de los datos oficiales de la inflación de enero hace una semana generaron sospechas, cruces entre el INDEC y el Gobierno y varias mediciones paralelas arrojadas por la oposición, incrédula del escueto 1,1%.
Sin embargo, recién ayer varios sectores hicieron concreta su denuncia al afirmar que el Gobierno cambió la metodología de medición en algunos rubros, como salud y turismo, para obtener un porcentaje que dejara tranquilo al oficialismo, en su afán de lucha contra la suba de los precios.
Por primera vez se habló en las oficinas del INDEC de manipulación del índice de precios al consumidor de enero (IPC), de una eventual intervención del organismo y de una creciente vigilancia en las oficinas de la entidad.
Desde la casa de Gobierno, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió a defender la medición al asegurar que “es imposible” manipular los índices que elabora el INDEC porque “se constituye con la participación de muchos funcionarios y desde ahí es imposible lograr esa digitación de la que hablan”.
Según el matutino La Nación, una fuente cercana al INDEC aseguró que a mediados de enero los precios referentes al turismo ya estaban altos, por lo que se comenzó a decir que con los datos recogidos era imposible tener un panorama más general de lo que sucedía en ese rubro.
LA solución del Gobierno fue entoces pedir los datos a la Secretaría de Turismo,que envió relevamientos donde los precios que se toman son los que figuran en los acuerdos de precios que firmaron las cámaras turísticas con el Gobierno.
El turismo fue la clave del bajo índice final, ya que, a diferencia de enero de 2006, no hubo variación.
En relación a la medicina prepaga, se dejó de lado el aumento del 22% y se incluyó en la medición sólo el 2% destinado a los planes que acepten el sistema de copagos, dejando de lado en el cálculo a quienes opten por mantener el antiguo plan de salud.
