La Argentina cuenta con estimaciones del PBI desde 1875. Entre dicho año y la Primera Guerra Mundial creció “a tasas chinas”, luego creció a tasas moderadas, entre mediados de la década de 1970 y fines de la de 1980 no creció nada, y luego volvió a crecer a tasas moderadas. Desde mediados del siglo XX se viene descolocando frente al PBI de casi todos los países del mundo.