Luego de las malas noticias que recibió la Argentina ayer cuando el MSCI decidiera mantenerla en la categoría de mercado fronterizo, el INDEC informó lo que podría dar cuenta de una posible salida de la recesión: después de tres trimestres en caída, el Producto Interno Bruto creció un 0,3% en el primer trimestre respecto en la comparación interanual.
En tanto, la actividad mostró un avance de 1,1 por ciento comparando con el cuarto trimestre de 2016, acelerando su ritmo de crecimiento luego de las subas de 0,1 por ciento del tercer trimestre y de 0,7 por ciento del último período.
Con estos resultados, desde la estimación estadística la Argentina salió técnicamente de la recesión.
"El crecimiento del PBI se aceleró a 1,1 por ciento lo que equivale a un ritmo anualizado de casi 4,5%, es decir que el crecimiento está siendo potente", afirmaron fuentes del Palacio de Hacienda a la agencia de noticias DyN.
A su vez, la inversión expresó una variación positiva de 3 por ciento frente al primer trimestre de 2016. Este aumento se explica por aumentos de 1,9 por ciento en construcción, de 1,1 por ciento en maquinaria y equipos y 20,5 por ciento en equipos de transporte. En tanto, la oferta global de bienes y servicios subió 1,2 por ciento.
Por su parte, el consumo privado aumentó 0,9 por ciento en la comparación interanual, mientras que el consumo público aumentó 1 por ciento.
De los 16 sectores que evaluó el INDEC, 12 ofrecieron avances y cuatro sufrieron retrocesos.
La pesca con una mejora interanual de 31,7 por ciento, resultó el sector de mayor expansión entre enero y marzo de este año.
Acompañaron el progreso el sector agropecuario (4,3 por ciento), construcción (1,9 por ciento), energía (0,7 por ciento), transporte almacenamiento y comunicaciones (3,7 por ciento), y restaurantes y hoteles (0,5 por ciento).
También crecieron actividades inmobiliarias (2,7 por ciento), la intermediación financiera (2,4 por ciento), enseñanza (1,7 por ciento), servicios sociales y de salud (2,1 por ciento) y servicios comunitarios (1,4 por ciento).
Los segmentos en caída fueron minería (5,4 por ciento), la industria manufacturera (2,2 por ciento), comercio mayorista y minorista (0,9 por ciento), contratación de servicio doméstico (0,7 por ciento).