Inmediatamente después que el Gobierno aceptara dialogar con el campo, dirigentes de las principales entidades agropecuarias pidieron que antes del encuentro se avance en la discusión acerca de las retenciones. De esta manera, la cuestión que provocó el conflicto de más 100 días durante el 2008 volvió a la escena como una especie de déjà vu político.
"En el tema de las retenciones debe haber algún tipo de avance para poder continuar el diálogo", afirmó el presidente de la Federación Agraria (FAA), Eduardo Buzzi, quien de esta manera volvió a condicionar al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. De esta manera, ahora habrá que esperar la posición que adopta el Ejecutivo antes de concretarse el ansiado encuentro.
Buzzi aseguró que en el tema de la de las retenciones "se la va la vida a miles de productores. En algún punto, el tema retenciones es negociable. De alguna manera, el tema retenciones debe ser abordado y resuelto, es inevitable". Y agregó, en una nueva chicana al Ejecutivo, que espera que Cristina Fernández no mande al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
Ex aliado de grupos piqueteros, Buzzi planteó que la administración Fernández de Kirchner no debe " mandar a Guillermo Moreno, a entorpecer, como fue todo el proceso anterior" de discusión con el campo. En diálogo con radio Mitre, reproducido por la agencia DyN, el dirigente sostuvo que en ese momento "hubo una voluntad del Gobierno porque fuéramos a la confrontación".
El titular de la FAA explicó que la postergación de la medida de protesta que el campo tenía prevista respondió a que "salir con un paro era una postal tan antagónica al problema general del país que había que otorgar esta posibilidad y hacer un último llamado a la cordura, a la sensatez, algo que hace meses que venimos pidiendo".
