No van a regalar frutas como sus colegas del Alto Valle: los productores de limones avisan que tienen una “situación distinta” a otras economías regionales y están con expectativas frente a la vuelta de las exportaciones a Estados Unidos y Brasil. Al menos eso mostraron las subas registradas en la Bolsa la semana pasada en dos de las acciones de una de las principales compañías del sector: treparon 18% y acumularon un avance de 30% en lo que va del mes.
Los que sí preparan un reparto al estilo de los productores de manzanas y peras son los lecheros, que tienen previsto repartir sachets esta semana para denunciar los problemas del sector.
En el segmento citrícola, en tanto, en las últimas ruedas, las acciones se dispararon. Lucas Méndez Trongé, director de Relaciones Institucionales de San Miguel, explicó: “Nuestro caso es distinto al de otros productores, que sólo tienen la posibilidad de apostar a la fruta fresca. Nosotros, además, tenemos otros negocios, como industrializar el limón y producir aceite, que es muy requerido para las gaseosas”.
Como exportadora de limones frescos del mundo, con un volumen que estiman en 60 mil toneladas, tiene 7 mil hectáreas en Tucumán y llamó la atención el fuerte salto de sus acciones, de $ 93,90 a $ 122,70 desde el inicio de agosto. “Todas las acciones están subiendo”, relativizó Méndez, que también informó que la empresa está en un proceso de auditoría interna para poder exportar a Estados Unidos, un mercado que estimó se abrirá el año que viene.
“El limón tiene un buen desempeño desde 2009, cuando otras economías regionales empezaron con problemas de costos y competitividad. Hay altos niveles de rentabilidad con Rusia, que paga US$ 25 la caja, y Europa, US$ 30”, señaló José Carbonell, presidente de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus).
En baja. La situación del limón contrasta con la de otros cítricos, como las naranjas y mandarinas. Mariano Caprarulo, director ejecutivo de la Cámara de Exportadores de Citrus del Noreste Argentino (Cecnea) indicó: “No sabemos cómo atender el corto plazo, estamos viendo si tomamos una medida como la de los frutihortícolas. Estamos hoy con un costo de producción de no menos de $ 2 por kilo y nos pagan $ 1,5 o $ 2”.
Según la consultora Gabinete MAG, cada kilo de manzanas tiene un precio promedio de $ 3 y con el empaquetado llega a $ 16,70. El flete le suma $ 1,30 para llegar desde Río Negro a Buenos Aires. Por cada manzana que paga un consumidor, entre 38% y 40% son impuestos que abonan productores, empacadores, transportistas y comerciantes, según la consultora.
Lácteos. Los productores lecheros reclaman por la diferencia entre los $ 4 que reciben por litro y el precio final, cercano a $ 17 en góndola. Para los supermercadistas reunidos en ASU, “comparar el precio del tambero con el de primera marca en una góndola es reducir el problema”. Aclara que el sachet de leche tiene un costo de compra que representa el 74% del precio final, por la influencia de fletes, mano de obra, envases, venta y reposición, entre otros.