El Banco Central terminó el primer mes del año con una caída de US$ 2.486 millones de las reservas, que ayer totalizaron unos US$ 28.100 millones después de tener una posición final levemente vendedora en la jornada de US$ 40 millones, que incluyó el pago de importaciones de energía.
Según confiaron fuentes del mercado mayorista, la autoridad monetaria pidió por teléfono a otros bancos que se postergaran compras de dólares hasta la semana próxima para así aliviar la presión sobre el tipo de cambio y evitar tener que vender más divisas a fin de contener una nueva suba del dólar.
Un experto en cambios señaló a PERFIL que “todo parece indicar que el Banco Central se cargó sobre sus espaldas la responsabilidad de mantener un tipo de cambio sin grandes modificaciones, por lo menos hasta que los exportadores realicen liquidaciones de importancia en marzo y le den un respiro”.
Tanto para corredores de cambios como para operadores de mesas de dinero, la posición que adoptó la gestión de Juan Carlos Fábrega es “una jugada arriesgada”, pero que, si logra ser acompañada por un aumento sustantivo de la tasa de interés y un siceramiento de la inflación, “tal vez obtenga el oxígeno que la entidad necesita”, y remarcaron que, al ser un hombre que proviene del sector, “confían en el camino que tomó para intentar recuperar la institución”.
Menos cepo. Al mismo tiempo, el grifo de dólares que el Gobierno abrió hace una semana a través de la habilitación para la tenencia del llamado “dólar ahorro” sumó unos US$ 94.721.317 en 178.548 operaciones efectivizadas.
Según detalló la AFIP, el monto total de las operaciones validadas –que incluyen los más de US$ 94 millones ya entregados a los ahorristas– llega a los US$ 156.400.053 al cierre de este viernes.
De ese total, cerca de US$ 142 millones fueron retirados y sólo unos US$ 14 millones quedaron depositados en el sistema financiero, pese a que se bonifica el recargo del 20% de anticipo de Ganancias.