El día de Europa en la Argentina se celebró con críticas al cepo y las restricciones a la importación. Desde el aula magna de la Facultad de Derecho, representantes de la diplomacia del Viejo Continente abandonaron la cautela habitual y reconocieron que “es necesiario restablecer las relaciones comerciales para que sean confiables”, según indicó el embajador de Alemania, Bernhard Graf.
El representante del gobierno de Angela Merkel también cuestionó el cepo al giro de dividendos. “Las empresas van a un país si piensan que vale la pena. Y si invierten dinero, un día lo quieren de vuelta, o por lo menos los lucros”, sostuvo Graf, que resaltó que las empresas alemanas crearon 20 mil empleos en el país.
El embajador de Francia Jean-Michel Casa evitó la palabra cepo y reconoció de cara a un nuevo gobierno que “es muy difícil salir del control de cambios”. Para él, las restricciones no limitaron las inversiones. El ejemplo, los US$ 700 millones anunciados el mes pasado por Renault y el acuerdo firmado por Total por US$ 1.000 millones para Vaca Muerta. El francés además reconoció que “hubo intentos del Gobierno para volver a los mercados internacionales, como el arreglo con Repsol por la nacionalización del 51% de las acciones de YPF, los acuerdos para pagar juicios en el Ciadi y el Club de París. “Fue muy bien negociado”, aseguró sobre este último punto, lo que puede ser interpretado como una confirmación de la conveniencia de los términos para los acreedores, a quienes la Argentina reconoció todos los intereses y la deuda generada por la última dictadura militar.
“Va a ser muy difícil para el Gobierno que siga negociar con los fondos” buitre, indicó Casa, quien consideró que el fallo del juez Thomas Griesa fue “moralmente contestado y muy injusto”. En la búsqueda de financiamiento bilateral, la Argentina deberá sortear obstáculos: “Vamos a terminar de firmar los acuerdos bilaterales con el Club de París pero queda por resolver el tema de la deuda”, afirmó.
En junio, el Mercosur se reunirá con la Unión Europea en Bruselas, en el marco de la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, Celac. Allí buscarán seguir con el intercambio de ofertas para un acuerdo de libre comercio entre los bloques pero los europeos no se mostraron muy confiados. “Hablar de bloque a bloque es complicado”, dijo el embajador francés. “Hoy los mercados del Mercosur son más y más cerrados, son más proteccionistas”, agregó.
“El intercambio de ofertas se retrasó. Hoy hay debate interno sobre si podría hacerse”, explicó el titular de la delegación europea en Argentina, Alfonso Díez Torres. “Se necesita impulso político”.