En medio de quita de subsidios, paranoia por los subtes y las tarjetas SUBE, y tantas otras medidas de corte económico que buscan achicar gastos y recaudar más, acorde a la sintonía fina, comenzó a regir el pago del “costo por gas importado”, que se creó mediante el decreto 2067 en 2008, pero que luego fue congelado debido a varias demandas judiciales.