A contramano de las directivas oficiales, el economista y actual director de la estatal Enarsa, Aldo Ferrer, afirmó que es preciso considerar la posibilidad de adoptar un ajuste en las tarifas de los servicios públicos "si los costos aumentaron y bajó demasiado la rentabilidad" empresaria.
Así, el economista del grupo Fénix se distanció de las palabras del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, quien en agosto pasado pidió a los empresarios nacionales que busquen una "rentabilidad justa y razonable por la que el Gobierno velará inexcusablemente".
De ese modo, en el I Foro Empresario, organizado por el diario Infobae en el hotel Sheraton, el ministro de Planificación había descartado ajustes de tarifas. Lo acompañaba el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, encargado en los últimos meses de congelar los precios en diretentes áreas de la economía.
Ferrer estimó además, que " existe la necesidad de reformas profundas: de régimen de tarifas, de régimen tributario, y más, para dar equidad al sistema. Creo que estos son puntos pendientes de la agenda (nacional)".
Sobre la posibilidad de que se autoricen ajustes en las tarifas, Ferrer dijo "no ser partidario en modo alguno de la rigidez de los precios: si hay desfasajes en algunos sectores, si los costos han aumentado y ha bajado demasiado la rentabilidad, hay que considerarlo".
"Pero hay hacerlo tomando en cuenta la diferencia de poder adquisitivo de los sectores", manifestó por radio El Mundo. Y agregó que "hay mucho que se puede hacer, además de lo que ya se está haciendo, para encontrar el equilibrio entre los ajustes necesarios de tarifas" de luz a clientes residenciales.
"Lo peor que podría pasar -manifestó- es que se instalara en la sociedad la expectativa de un rebrote inflacionario".
El ex ministro de Economía se refirió, también, a la posibilidad de que se produzca una nueva crisis energética. Al respecto, aseguró que la Argentina "todavía tiene excedente de energía" y afirmó que si siguen ejecutándose los proyectos en marcha "no es previsible" una crisis por escacez de oferta.
Para él funcionario, los infornes que indican que las empresas privadas no han invertido en exploración "s on consecencia de una política imprudente de privatización indiscriminada".