ECONOMIA
EN PLENA NEGOCIACIÓN CON FERNÁNDEZ

FMI advierte estancamiento en Latinoamérica pero hace silencio sobre Argentina

El director para el Hemisferio Sur estimó en un informe que el escenario actual plantea nuevos retos y la urgencia de una reactivación en toda la región.

kristalina georgieva fondo
Kristalina Georgieva, directora del Fondo. | AFP

El Fondo Monetario Internacional (FMI) destacó este miércoles que la economía de Latinoamérica se estancó en 2019 y advirtió una agudización de los riesgos regionales, según una actualización de sus previsiones.

Con respecto a Argentina -a quien el FMI le dio la mayor línea de crédito de su historia- el organismo no actualizó las previsiones realizadas en octubre, dada la incertidumbre actual, en un momento en que el gobierno de Alberto Fernández está negociando para reestructurar la deuda.

"No revisamos las perspectivas para Argentina", dijo el director del FMI para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, dado que el gobierno de Fernández recién asumió, por lo que el FMI mantuvo sus proyecciones de una contracción de al economía de 3,1 en 2019 y de 1,3 en 2020.

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"Una actualización de las previsiones iba a ser tremendamente incierta, iba a generar más incertidumbre, así que decidimos esperar hasta tener más información", agregó, en un momento en que el Fondo prepara una misión en febrero a Buenos Aires.

La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, se reunirá con el ministro de Economía, Martín Guzmán, el próximo 5 de febrero en el marco de un congreso organizado por el Vaticano, según confirmó el portavoz del organismo Gerry Rice.

Región estancada

Werner estimó en el informe que el escenario actual plantea nuevos retos y la urgencia de una reactivación en toda Latinoamérica: "De hecho, el PIB real per cápita de la región ha disminuido 0,6 por ciento por año en promedio durante el período 2014–2019", señaló el economista, destacando el contraste con un aumento de 2% durante el periodo de auge de las materias primas entre 2000 y 2013. 

En su informe publicado la semana pasada, el FMI rebajó en 0,2 puntos porcentuales a 1,6% su previsión de crecimiento para América Latina en 2020 por las protestas en Chile y por la debilidad de las inversiones en México. Estas proyecciones se dan en un contexto en el que la entidad rebajó en una décima de punto, a 3,3%, su expectativa de crecimiento mundial para este año.

Para el FMI las causas de las tensiones sociales que también afectaron a Ecuador y Colombia, varían de un país a otro, pero en general reflejan una "insatisfacción con ciertos aspectos de los sistemas económicos y políticos". "Una prioridad clave hacia adelante es la de reactivar el crecimiento y hacerlo más inclusivo, manteniendo la estabilidad macroeconómica", señaló.

Para Werner la "falta de ímpetu" obedece por un lado a factores estructurales, como la escasez de inversión, el lento aumento de la productividad y un clima poco propicio para los negocios. También atribuyó la debilidad a condiciones cíclicas como el bajo nivel del crecimiento mundial, los precios de las materias primas, la fuerte incertidumbre y la "tensión social" en algunos países. 

Una "oportunidad" para Chile, "ligero" ajuste para Bolivia

En el caso de Chile, la organización recortó las previsiones de crecimiento para 2020 a un 0,9%, una fuerte disminución con respeto al pronóstico hecho en octubre -antes del inicio de las protestas- cuando el FMI proyectaba una expansión de 3% para este año. Werner señaló, sin embargo, que el proceso constitucional en Chile tras la ola de protestas es una "oportunidad". 

La protesta - que dejó una treintena de muertos - presionó a los sectores políticos para convocar un plebiscito el 26 de abril, para decidir si se cambia la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet. "La expectativa de este proceso que se vaya a llevar a cabo en los próximos años, sea una inversión. Inversión quiere decir que uno incurra en un costo, dada esta incertidumbre", señaló. 

"En Bolivia revisamos los pronósticos ligeramente a la baja", dijo Werner sin dar datos sobre la previsión para el país andino tras la renuncia del expresidente Evo Morales tras las irregularidades en las elecciones y la toma del poder por un gobierno interino. En octubre, el FMI había proyectado una expansión de 3,9% en 2019 y de 3,8% en 2020 tras cerrar 2018 con un crecimiento de 4,2%.

DS