ECONOMIA
Las protestas de transportistas

Jaqueadas por los cortes de ruta, varias provincias están a punto de quedar paralizadas

La situación se agrava, sin soluciones a la vista. Escasea el combustible y se notan faltantes en los productos de primera necesidad.

Un imagen de la ruta 14 el pasado viernes, hoy está desalojada por Gendarmería.
| Cedoc

Racionamiento de naftas y diesel en estaciones de servicio, reducción de frecuencias de transportes públicos, falta de productos de primera necesidad y recortes de gastos se constituyeron ayer en el denominador común en casi todo el interior del país. Mientras el Gobierno nacional se empeña en relativizar la grabvedad de la situación, los transportistas de cargas endurecen los cortes de ruta y miles de camiones varados testimonian un caldo de cultivo explosivo.

Lentamente comienzan a verse góndolas semivacías en los supermercados de barrio, los precios de algunos productos muestran aumentos y nada hace prever que se encuentren soluciones en las próximas horas. Las autoridades insisten en negar una realidad que solo necesita un poco más de "hervor" para convertirse en explosiva.

Reportes realizados por DyN en cinco provincias mostraban ayer un severo faltante de combustibles y la posibilidad cierta de que colpase la actividad económica y administrativa. En Rosario, las cámaras de estaciones de servicio advirtieron que para mañana al mediodía se agotarán las reservas y que "no se puede garantizar el suministro a servicios esenciales".

La crisis en Córdoba se agravaba con el paso de las horas, a raíz de los múltiples cortes que transportistas de cereales realizan sobre rutas del interior provincial, mientras en la Capital y otras ciudades ya se siente el desabastecimiento de carnes y lácteos. Desde ayer, largas colas de automóviles en busca de nafta y gasoil se podían ver frente a estaciones de servicio. En tanto, líneas de transporte urbano e interurbano advirtieron que por falta de combustibles podrían reducir sus frecuencias. Incluso, se vio complicado el normal abastecimiento de combustible desde Monte Cristo, donde funciona la planta de Repsol YPF.

En Catamarca, el paro de transportistas provocó que un grupo de estaciones de servicio de esta capital quedara sin combustibles, y que el resto esté vendiendo las reservas, que se agotarían hoy. Desde hace dos días, las expendedoras de naftas Esso, Petrobras y San Lorenzo no tenían ningún tipo de combustibles para vender, en tanto las estaciones de servicio de Shell, YPF y Refinor amanecieron hoy con largas colas de automovilistas que buscaban conseguir un poco de las reservas de nafta común y gasoil.

En La Pampa, 24 instituciones intermedias, entre cámaras de comercio y centros acopiadores, solicitaron una audiencia "urgente" con el gobernador Oscar Mario Jorge (PJ), prevista para mañana.

El presidente de la Cámara de Expendedores de esa provincia, Miguel Ripa, indicó que "si bien los taxis y ómnibus aún no padecen el desabastecimiento, el usuario en general ya está sufriendo la escasez, dado que hay camiones retenidos y otros que ni siquiera salieron hacia la provincia".

En Formosa, el marcado déficit de combustibles que se registra en las distintas estaciones de servicios de la capital provincial ya altera la vida cotidiana de miles de personas, pudo comprobarse hoy.

Muchos formoseños deben pasar hasta tres horas en una larga fila a la espera de unos pocos litros de nafta para su vehículo, llegando incluso a solicitarle al gobierno que se establezca un asueto administrativo en la administración pública local hasta tanto se normalice la provisión de gasoil y naftas. Una escuela pública recientemente inaugurada para atender chicos con deficiencias físicas debió suspender el servicio domiciliario de búsqueda de los alumnos.

Por otro lado, el desabastecimiento de combustibles en La Rioja comenzó a afectar seriamente la normal actividad de la provincia, lo cual obligó al gobierno a realizar ajustes de gastos de manera preventiva.

La escasez de naftas y gasoil provocaron un recorte de frecuencias en los servicios públicos, comenzaron a faltar productos de primera necesidad mientras que la mayoría de las estaciones de servicio no expenden combustible y, las pocas que sí lo hacen todavía, lo racionan en cupos de entre 30 y 50 pesos. En una reunión con el intendente de la Capital, Ricardo Quintela, el gobernador Luis Beder Herrera dispuso un ajuste del gasto público.