La inflación minorista de noviembre se situó en el 1,4 por ciento y el acumulado del año alcanzó al 21 por ciento, cifra que se sitúa muy por encima de la banda del 12 al 17 por ciento calculado para todo 2017 por el Banco Central.
Los rubros que más aumentaron el mes pasado fueron transporte con tres por ciento, debido al incremento de los combustibles; salud con 1,3 por ciento, por suba de la medicina privada y el mismo guarismo en prendas de vestir y calzado con 1,3 por ciento, por el lanzamiento de indumentaria para la temporada de verano.
El resto de los sectores mostraron la siguiente evolución: alimentos y bebidas no alcohólicas subieron 1,2 por ciento, bebidas alcohólicas 1,1; vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, 1,2 por ciento, equipamiento y mantenimiento del hogar 0,9 por ciento, comunicación 0,7 por ciento al igual que recreación y cultura, eduación 1,3 por ciento y restaurantes y bares 1,8 por ciento.
El mayor incremento de precios al consumidor en forma acumulada en el interior del país correspondió a la región Noroeste con 21,5 por ciento y la menor a Noreste con 19,7 por ciento.
Con esta cifra, y teniendo en cuenta que diciembre va a tener una inflación bastante más elevada (se habla de entre 1,8 y 2,0 por ciento) la inflación global de todo este año se estima que terminará entre 22,5 y 23,5 por ciento.