La interna por seguir ajustando y bajar la inflación o empezar a crecer se recrudeció y tanto en Economía como en Producción apuntan contra el Banco Central y las altas tasas de interés que le pusieron freno a la actividad. “Federico ya está bajando las tasas, esperemos que nos ayude un poco para que la demanda traccione”, comentaron en el Palacio de Hacienda. El intento llega tarde, según el sector privado: el anuncio de Ganancias, provocado por la oposición, se suma a los bonos por los que presionaron los gremios y sectores sociales.
En septiembre la economía cayó 3,7% interanual y acumuló una retracción de 0,9% trimestral (-3,8% interanual). “Los indicadores adelantados de octubre y noviembre tampoco exhiben un mejor desempeño relativo. El PBI real caería este año 2,7%”, ponderó un estudio de ACM, casi el doble de lo previsto en el Presupuesto (-1,5%).
A la recesión se suma también la incertidumbre externa. “Corregimos nuestra estimación de caía del PBI de 2,3 a 2,6% para este año”, explicó Marina Dal Poggetto, del Estudio Bein & Asociados. “Para el año que viene mantenemos un escenario base con un repunte de 5% del PBI”.
Para Elypsis, dirigida por Eduardo Levy-Yeyati, la incertidumbre recae sobre Sturzenegger. El 2017 “dependerá de cómo se resuelva la tensión entre desinflar la economía e inflar la actividad. La velocidad y solidez de la recuperación dependerá de la capacidad del BCRA de reducir la tasa real sin descuidar la inflación (lo cual depende de la credibilidad de su estrategia). El Gobierno enfrenta dilemas múltiples: bajar la inflación, contener el déficit, evitar el abuso del ancla cambiaria y crecer. En 2017 continuará priorizando el último objetivo por sobre los otros, con un margen fiscal y político más estrecho”.
Dal Poggetto también aclara que “se observa un arrastre más negativo para el arranque del año que viene”. Por eso abrieron un segundo escenario “con mayor volatilidad del dólar en el exterior y una incógnita sobre cuánto acompañará el Banco Central la devaluación de las monedas de la región”.
Reclamos. En la semana de la Conferencia Industrial de la UIA, los empresarios del sector apuntaron a las altas tasas de interés y la caída del consumo, interno y de las exportaciones, para explicar la falta de inversión: las fábricas sólo están usando el 60% de su capacidad instalada. Los industriales volvieron a poner el foco en la “alta presión tributaria” y los “costos laborales y logísticos”.
Los funcionarios del Gobierno que visitaron a la UIA reconocieron la supersposición de impuestos, pero aclararon que llevará tiempo. “En los próximos tres años esperamos poder discutir la presión tributaria y una nueva ley de coparticipación federal”, dijo el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. En la Mesa de la Producción que se generó el miércoles, donde se selló un nuevo ‘acuerdo antidespidos’ no vinculante, los reclamos gremiales fueron por el lado de la revisión de los convenios colectivos de trabajo.
El sector financiero, menos golpeado, ve uno de los pocos “brotes verdes” con la mayor demanda de crédito, aunque por debajo de los niveles del año pasado. Los créditos en pesos avanzaron 19,7% interanual.