ECONOMIA
gobernadores en rojo

Las últimas subas impositivas irán a pagar el efecto “salariazo policial”

Con alzas de Ingresos Brutos las provincias recaudaron $ 21.000 millones extra. La pauta de 30% pone un piso al resto de empleados públicos. El déficit subirá a $ 26.000 millones

Paritarias adelantadas. El Gobierno sigue pidiendo calma y prudencia a la hora de pedir aumentos tras la ronda de acuertalamientos.
| AFP

La protesta policial desatada recientemente en Córdoba, que se propagó casi instantáneamente al resto de las provincias, modifica radicalmente el escenario para el 2014, dado que afecta la variable más sensible para la “caja” provincial, esto es, el gasto en personal. Un aumento promedio salarial de 30% arrojará un déficit anual cercano a los $26.000 millones para 2014, cuando los gobernadores, a fuerza de reformas impositivas que llevaron la presión tributaria a batir récords, lograron generar $21.000 millones extra a lo largo de éste año.

Sobre un total de 2 millones de cargos públicos a nivel provincial, el personal afectado a Seguridad (policía y servicio penitenciario) concentra unos 300 mil agentes, esto es, un 15% de la planta total, y algo similar del gasto salarial. De este modo, en 2013 el conjunto de provincias habrían destinado $39.000 millones para cubrir los sueldos de seguridad, sobre un gasto en personal total de $260.000 millones.

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Pese a que la incidencia relativa del personal policial es reducida, existe una alta probabilidad de que el aumento otorgado, termine dificultando las negociaciones salariales del resto de los empleados de la administración pública provincial.

Esta situación se daría en un contexto de escaso margen para incrementar los recursos propios, ya que la mayoría de las provincias introdujo amplias reformas tributarias en los últimos dos años, llevando la presión fiscal provincial a sus máximos históricos, y un 2014 donde, de no mediar refinanciación, las provincias deberán atender los servicios de la deuda reprogramada con el Gobierno nacional, otros $10.000 millones en concepto de intereses y amortizaciones. Los efectos para el 2014 puden sintetizarse en tres escenarios:

Escenario A. Contempla un aumento promedio salarial del 26% para todos los empleados provinciales. Arroja un déficit anual cercano a los $17.000 millones, es decir, se “perdería” lo ganado en 2013, ya que el rojo crecería un 56%, volviendo a los niveles de 2012. Contempla la suba de $14.000 millones en los servicios de deuda (ver aparte).

Escenario B. Incluye el 26% aumento promedio junto a una suba del 30% para el personal de seguridad. Este incremento diferencial implica un gasto adicional de $1.320 millones, de modo que de convalidarse este escenario, la situación de las finanzas provinciales no diferiría mucho de nuestras expectativas preliminares. Pero es poco probable.

Escenario C. Incluye aumentos del 30% para la totalidad de los empleados provinciales, subiendo en este caso a $350.000 millones el gasto en personal y a $26.000 millones el déficit anual. Incluyendo el pago de amortizaciones, el rojo sube hasta $47.500 millones, prácticamente el doble del alcanzado en 2013, y representando el 1.5% del PIB, una cifra cada vez más difícil de financiar.
Hay que recordar que no hay margen para una nueva ola de subas impositivas. Esto se vio con claridad en la provincia de Buenos Aires, cuyo Proyecto de Presupuesto incluía una “contribución especial” del 18% en las partidas del Impuesto Inmobiliario y que debió ser eliminada.

 

(*) Economista Jefe de E&R.