El gremio La Bancaria acató esta tarde la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y decidió levantar el paro de actividades que realizaba en todos los bancos del país en reclamo de incrementos salariales.
Así lo informaron fuentes de la cartera laboral al término del encuentro que representantes sindicales y del sector bancario realizaron en la sede del ministerio conducido por Carlos Tomada.
En tanto, el Ministerio de Trabajo anunció que multará al gremio bancario con "cinco mil pesos por cada trabajador" que haya adherido al paro iniciado esta mañana, a pesar de la conciliación obligatoria dictada por la dependencia oficial.
Esta mañana, el director de Negociación Colectiva de la cartera laboral, Adrián Caneto, manifestó que fueron enviados inspectores a las distintas entidades "para ver si hay que multar al sindicato y los trabajadores". "Si no se cumple con la conciliación obligatoria, va a haber una multa", añadió.
Caneto rechazó el argumento del secretario de Prensa de La Bancaria, Eduardo Berrozpe, respecto de que no se recibió en la sede del gremio la correspondiente notificación: "Es una pavada que lamentablemente le gusta decir todos los años", indicó.
En declaraciones radiales, Berrozpe sostuvo: "No tuvimos la notificación fehaciente" de la conciliación obligatoria. "La conciliación obligatoria debería haber sido dictada en el momento en el que una de las partes genera el conflicto. Están las pruebas de que (los bancos) no están cumpliendo con los acuerdos vigentes. En la sede administrativa (del sindicato) nos informaron los responsables que no hubo ninguna notificación fehaciente", indicó el dirigente.
Una fuente de la cartera laboral aseguró que "por ahora está efectiva" la sanción porque La Bancaria inició la medida de fuerza a pesar de que ayer el ministerio que conduce Carlos Tomada había dictado la conciliación obligatoria.
El paro nacional de actividades de los trabajadores nucleados en la Asociación Bancaria (AB), comenzó en el primer minuto de este jueves, en demanda de mejores salarios y un estricto cumplimiento de las normas laborales por parte de los bancos.