Dos señales cláramente negativas complicaron este lunes la apertura de la semana en los mercados de capitales:
- Reaparecieron los fantasmas del default en Grecia. Aunque el gobierno griego insiste en que evitará la cesación de pagos, la desconfianza de los inversores fue más fuerte.
- El sentimiento de los inversores es de desconfianza al plan del presidente de Estados Unidos, Barack Oabama, para crear empleos.