Los trascendidos sobre un eventual plan del Gobierno de Cristina Fernández para estatizar YPF llegaron a España y los títulos de la controladora de la petrolera sintieron el impacto. Las acciones de Repsol, que controla el 58% del YPF, cayeron con fuerza en la bolsa de Madrid como una réplica de lo ocurrido ayer en la cotización de los papeles de su filial argentina en la rueda bursátil.