Un grupo de ocho establecimientos agropecuarios que trabajan en conjunto unas 15.000 hectáreas se esforzaron durante el último año siguiendo pautas de gestión a nivel de lote, coordinados por el programa Sustentia y basándose en Smartfield, la firma que diseñó el software para asentar los procesos y los apoyó a cada paso con una guía para producir en forma sustentable.
Syngenta y Smartfield se valieron de las herramientas web para la capacitación de cien personas a través de jornadas de planificación, de gestión de procesos a campo y gestión de residuos, seguridad e higiene, manipulación de productos fitosanitarios y certificaciones. En conjunto se brindaron más de 3.000 horas de consultoría.
“La agricultura hoy es un negocio de generaciones, por lo que todos somos responsables de cuidar hoy y mañana de nuestra tierra, como de proveer la producción sustentable de alimentos”, dijo Cristianne Close, la directora de Seguridad Alimentaria y Sustentabilidad de la compañía para América latina. “El primer año de Sustentia –tal es el nombre que ha recibido el programa– ha demostrado que los productores, las empresas y la sociedad podemos trabajar juntos y lograr una mayor sustentabilidad socioambiental en el campo, junto con una ganancia en la eficiencia productiva. Hoy los resultados están a la vista”, indicó en el encuentro que celebraron el miércoles pasado en la residencia del embajador de Suiza (ver recuadro).
Entre los logros del primer año del programa, los establecimientos participantes realizaron el triple lavado del 90% de los envases de agroquímicos usados. “El tema del descarte de los envases de fitosanitarios es uno de los grandes problemas que tenemos a campo”, explicó Gustavo Bellanti, de la Administración E. Duahu, que participó del programa Sustentia con la estancia La Candelaria, ubicada en el centro-oeste de la provincia de Buenos Aires. “Además, trabajamos mucho en la capacitación del personal en temas de seguridad e higiene, y logramos reducir sustancialmente la tasa de accidentes, que en las labores del campo suelen ser serios”, indicó.
Otro de los temas en los que trabajaron fue la clasificación de la basura para reciclar residuos. “Tenemos alianzas con la municipalidad de 30 de Agosto para realizar el procesamiento de la basura y ya conversamos con el municipio de Trenque Lauquen para convertirnos en los primeros productores que van a reciclar residuos patológicos”, indicó el empresario.
Los logros no quedan ahí, sino que implican asentar, registrar, planificar y medir todas las actividades, porque el registro es la única base sobre la que se puede rectificar. Sustentia no deja de ser todavía una pequeña iniciativa, aunque tiene ambiciones de crecer y traspolarse al resto del mundo. Como reza una antigua frase a campo: “La tierra no la heredamos, sino que la tomamos prestada de nuestros hijos”. Y si la mística no alcanza, también están las leyes de mercado mandando, porque lentamente, a nivel mundial, comienza a revelarse la veta de negocio que permite ofrecer –gracias a estos procesos– alimentos trazables, producidos en consonancia con las reglas que dicta el medio ambiente y que el mercado valora.