La gran incognita del arte vip local
Es uno de los misterios del mundo del arte vernáculo –y porteño– que surgió este año en la apertura de ArteBA 2019. Y la incógnita ya no es descubrir quién compró ese día la obra del argentino Jorge de la Vega, propiedad de Bruno Barbier, el ex de Juliana Awada, sino si verdaderamente se vendió. Afirman que sí quienes defienden a María Calcaterra –hija de Angelo, el famoso primo de Mauricio Macri–, quien ofició de vendedora a través de su secular galería de arte. Muchos lo ponen en duda porque a ésta altura el porte de esa obra no es fácil de ocultar, y no son muchos los argentinos que pudieron haber pagado US$ 1,3 millones. Eduardo Costantini dijo que la quiso pero el cash no le daba; e incluso se consultó a un gobernador que, espantado, negó ser el comprador. Lo que sí se supo hace muy poco es que esa obra pudo haber terminado en el Museo Nacional de Bellas Artes y haberse convertido en la primera de De la Vega allí. A través de la diplomática gestión de una integrante de la Fundación de Amigos del Bellas Artes se convino con Barbier una cifra posible e inferior a la que se habría vendido, y esa organización reunió la mitad pero el dinero restante que debía aportar la Secretaría de Cultura de la Nación nunca se concretó. Barbier esperó cuatro meses –más de lo estipulado– para que el trato se cerrara, pero no pudo ser. El resto es historia conocida... y también un misterio.
Tiempo de recaudar
Octubre es el mes en el que se aceleran las comidas de recaudación para fines múltiples. Y la de la fundación Argentina Por Más no fue la excepción. Ya van por el quinto año de reuniones de este tipo, y esta vez fue en el Alvear; su titular, la doctora Diana Chugri, reunió 300 invitados para juntar fondos para el porteño Hospital Rivadavia. Y logró que hasta Cristina Díaz Alberdi, la madre de Horacio Rodríguez Larreta, participara. De bajo perfil, cedió protagonismo a otra infaltable en estas comidas, Mirtha Legrand.
De boca a pampita
En la recta final electoral, que hoy concluye, al menos en la provincia de Buenos Aires dado que no hay ballottage, hubo espacio estos días para al menos dos cosas off campaña. Una fue bancar algunas cargadas por WhatsApp que varios funcionarios de María Eugenia Vidal reconocidos fans de River Plate les hicieron a los de Boca, como Gustavo Ferrari, cuyo fanatismo xeneize lo hace un invitado infaltable en la cena anual del equipo azul y oro. También algunos cruzaron mensajes con los funcionarios de Nación, menos Macri. Y la segunda fue ver cómo en el futuro se hará la selección de algunos integrantes de los equipos para evitar a los del tipo de Rodrigo García Moritán, más conocido como “el novio de Pampita”. Si bien había otras urgencias, no cayó bien la ostentación en redes de la puesta en escena de su pedido de casamiento a la famosa conductora.