La metamorfosis de la panelista de Bendita TV se confirma con sus respuestas. Ya no habla de sexo ni de las andanzas con su ex Guillermo Cóppola, sino de amor y convivencia. Incluso, se entusiasma al enumerar sus nuevas ocupaciones familiares y las actividades que comparte con los hijos de Sebastián Eskenazi, su actual pareja y CEO de la petrolera YPF.
Tan segura como se muestra en televisión, Franchín asegura no arrepentirse de nada. Salvo de Patinando por un sueño, donde duró un par de semanas. “Nunca pude perderle el miedo al hielo –recuerda–. Fue desastroso, tenía mucho temor a lastimarme”.
—¿No disfrutaste la experiencia?
—Sí, pero en esos quince días lloré como nunca. Experimenté una sensación que nunca había tenido en ningún programa. Nunca fui tímida frente a cámaras, pero ahí me ponía muy nerviosa. ¡Y encima estaba sobre patines!
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