Luego de más de 50 años de carrera, que la convirtieron en figura indiscutida de la música mexicana, la cantante Chavela Vargas dijo adiós a los escenarios luego de un concierto en el que fue homenajeada por varios colegas.
La despedida, que contó con la última presentación de la cantante, se llevó a cabo en el Teatro de la Ciudad en la capital mexicana bajo la organización del Gobierno de la ciudad azteca.
Entre los artistas que homenajearon su trayectoria se hicieron presentes la bailarina Yolanda Montes, la cantantes Elsa Aguirre, Imelda Millar, Lila Donws, Blanca Guerra, Rebeca de Alba y Eugenia León y el escritor Carlos Monsiváis, que le dedicó unas palabras a Chavela.
Chavela interpretó frente a un auditorio que no paraba de ovacionarla algunas de sus canciones más recordadas como "Macorina" y "Un mundo raro".
Vestida con su tradicional "jorongo" oaxaqueño color rojo, Vargas se despidió, pero dejó claro que no era para siempre. " Esta noche vale por 20.000 y espero que no sea la última, nos estaremos encontrando a través de este México que ahorita está dormido, pero nada más dejen que despierte y ya verán el susto que nos mete", dijo al retirarse entre aplausos y los gritos de "otra, otra".
El legado de la Vargas. "Yo ya me voy porque los años pasan, pero la dejo a ella en mi lugar", dijo la leyenda y presentó así a Lila Dawns. Acto seguido, la sucesora entonó el tema de "La tequilera", un motivo popular que habla de mujeres que toman y cantan.
Terminada la presentación de Dawns, Vargas afirmó, en plena defensa de la cultura nacional que "es muy bonito que se quede representada la canción mexicana con Lila y no que suenen esas cosas raras de chantum chantán. Mejor que quede la música mexicana, esa que nos enorgullece".
Vargas, costarricense de nacimiento pero mexicana de alma, llegó a tierra azteca cuando tenía 14 años y a los 30 inició una ascendente carrera profesional de la mano del compositor José Alfredo Jiménez.