Después de 11 días de cine en la Ciudad de Buenos Aires, el 19º Bafici llega hoy a su fin. El festival dirigido por el crítico y periodista Javier Porta Fouz comenzó el pasado 19 de abril, con la proyección de la película Casting, el film alemán de Nicolas Wackerbarth, y una protesta a las puertas de esa apertura de parte de la comunidad del cine que buscaba poner en alerta sobre la situación actual del Incaa. Más allá de ese inusual comienzo, el festival se desarrolló de forma natural, y cabe aclarar que con mucho respeto por parte de esa misma comunidad del cine hacia el festival, sin que eso implicara no expresar su malestar frente a la mencionada situación.
La gran visita que deja en el haber la nueva edición, dueña de 32 sedes a lo largo de toda la Ciudad de Buenos Aires, es el italiano Nanni Moretti. Buenos Aires es una eterna ciudad enamorada del cine italiano –eso es indiscutible–, y aunque el director de Caro Diario y Habemus Papa escapa a esa definición más tradicional, más básica, realmente es el cineasta más importante con vida de su país y uno de los nombres claves del cine europeo contemporáneo. Verlo en sus dos presentaciones públicas contar anécdotas, hablar de sus pasiones cinéfilas, su odios, su forma de entenderse, presentando uno de los dos libros del festival (Ecce Nanni: el testigo crítico) y responder preguntas del público, que siempre había querido conocerlo (también en sala y hasta en una proyección al aire libre) ha sido el gran lujo que el Bafici les regaló a los cinéfilos de Argentina. Moretti demostró que es un director actual, que nos es cercano y que define como pocos lo mejor del cine que se estrena en el mundo. Otra vez: un verdadero lujo, y uno popular, enorme, y muy bienvenido.
Otra visita de lujo que tuvo el festival fue la presencia de Don Letts, nombre clave de la mezcla entre el punk y el reggae que llegó bajo el marco de la sección 40 años de Punk y que convivió en sus primeros pasos como cineasta documental salvaje con nombres como Joe Strummer o incluso Sid Vicius. En sus presentaciones, Letts ofreció a los fans de su obra y los satélites que la rodean historias nuevas, de esas que cualquier enamorado anhela escuchar (por ejemplo, cuando aclaró que el Vicius de Sid Vicious era irónico hasta que la prensa empezó a abusar del nombre). Walter Veltroni, alguna vez alcalde de Roma y nombre fuerte de la política europea, fue otra visita que generó una estela particular a lo largo del festival, ya sea en su forma de entender el vínculo de los niños con el cine en una charla o presentando su film I bambini sanno.
Incluso hoy, en el último día del festival, existen oportunidades para ver películas que no van a estrenarse en nuestras salas. Sin ir más lejos, a las 18 en Plaza Francia, una de las sedes al aire libre y con entrada libre y gratuita, se podrá ver The Red Turtle, la última película del estudio de animación japonés Ghibli, casa de los films del querido maestro Hayao Miyazaki. Una película distinta, la primera coproducción con Europa del estudio, y dirigida por Michael Dudok De Wit, un animador holandés elegido a dedo por el propio Miyazaki. Un film absolutamente distinto, que merece la pena ser disfrutado. Ese mismo día el cierre al aire libre es melómano-documental Thank You, Friends: Big Star’s Third Live… And More, el regalo para los amantes de Big Star, donde se puede ver parte de la banda sonando junto a Wilco, R.E.M. y otros conjuntos legendarios.
También para niños
El Bafici se ha caracterizado por ser dueño de una sección que se vincula con el cine infantil como casi ninguna otra en el mundo. Suena exagerado, pero pocos festivales poseen la cantidad de películas para niños del festival porteño o, como sucedió con la nominada al Oscar y nunca vista antes en nuestro país La vida de Calabacín, las ponen en un lugar privilegiado del evento. En ese sentido, hoy todavía hay oferta para llevar a los niños a las salas. Desde las 11 en el Village Recoleta 1 se puede ver Louis & Luca. The Big Cheese Race, film de stop-motion. Otro estreno tendrá lugar, y ese es el proyectado en español Una cigüeña en apuros, animación digital que llega en carácter de preestreno. También se podrá ver tanto la francesa Dofus. Livre 1: Julith (Village Recoleta a las 13) y la española Teresa y Tim. La magia de la amistad (Cultural San Martín a las 16.30). Se suma a la lista la china McDull, Rise of the Rice Cooker (Atlas Belgrano a las 18) y cita obligada: dos clásicos con un plus. Se podrá ver Laberinto (15.15 en el Village Recoleta) y La historia sin fin (en el Gaumont a las 17). Ambas se proyectan con Contratiempo de alturas, un corto de García Ferré poco visto y que el festival junto a la familia del autor ayudó a que se proyecte.