Además de los incendios que azotaron California, ahora el ex Terminator debe ocuparse de otro tema que lo tiene como protagonista: salió a la luz un documental en el que se lo puede ver fumando marihuana cuando aún ni siquiera estaba en sus planes convertirse en gobernador.
El inconveniente es que , una y otra vez, el actor se ocupó de dejar en claro que él jamás consumió drogas. " Mi única adicción es levantar pesas", repetía irónico en cada entrevista en la que se le preguntaba sobre el supuesto uso de anabólicos.
Ahora, la salida a la luz de un documental – Pumpig Iron - de 1970 puso a Arnold en problemas: allí puede verse claramente a este hombre que hace un culto de la "mano dura" fumando marihuana.
Entonces, el fornido gobernador encontró la manera de no quedar como un mentiroso. Simplemente aclaró que para él la marihuana no es una droga. " Efectivamente le he fumado, pero la marihuana no es una droga, son simples hojas color verde", señaló.