Adrián Suar lo insinuó hace unos meses: el formato de Bailando por un sueño ya está agotado. Ya no basta con que famosos y no tanto muestren su destreza en los distintos ritmos. Tampoco basta que los jurados se centren en cuestiones personales. Ni que los participantes peleen en cámara. Ni que la ropa que lucen en las galas sea cada vez más pequeña.
Hace apenas un par de semanas se realizó un repechaje. Algo polémico de por sí que alcanzó niveles de disparate cuando se dieron a conocer los concursantes. Entre los famosos – y entre los soñadores, también- había varios que no habían participado –al menos- de esta edición del concurso. Sin embargo, consiguieron junto a María Fernanda Callejón, Pablo Ruiz, Marixa Balli y Adabel Guerrero colarse de nuevo en la competencia.
Allí están, entonces Matías Alé y su histórica soñadora Gisela Bernal junto a Mariana De Melo. Seis concursantes que por distintas razones pueden ser considerados terribles como competencia.
Pero parece que no serán los últimos en incorporarse a Bailando. Según informó ayer Exitoína, el blog sobre famosos de Perfil.com, Evangelina Anderson está embarazada de dos meses y abandonaría la competencia. Como reemplazante entraría Eliana Guercio. Los concursantes que vienen bailando desde el principio y zafando de las sentencias están cada vez más furiosos.