Los zombies no son tan peligrosos como las personas

La ansiedad efusiva para los fanáticos de The Walking Dead empezó el sábado pasado en el panel de la Comic Con de Nueva York. Los protagonistas Andrew Lincoln, Jeffrey Dean Morgan, Norman Reedus, otros diez compañeros de elenco y parte del equipo creativo de la serie de AMC, disertaron ante una multitud en el Teatro del Madison Square Garden y adelantaron algunos detalles de lo que se verá a partir del domingo 22 de octubre, a las 22.30, por FOX cuando empiece la octava entrega promocionada como “La guerra sin cuartel”, donde “los chicos buenos”, liderados por Rick Grimes (Lincoln), deberán batallar contra Los Salvadores, capitaneados por el villanísimo Negan (Morgan) que, camperita de cuero ajustada, modela con su palote de béisbol al que bautizó Lucille, el mismo bate con el que le aplastó la cabeza al queridísimo Glenn en la génesis de la séptima entrega.   

A partir de ahora ponemos la placa: “Alerta spoiler”. Todo lo que se lea puede jugar en contra de su adicción a la serie nacida de la historieta de Robert Kirkman. Y empezamos por las muertes. “Hay algunas grandes muertes esta temporada, sólo para advertir a todo el mundo, creo que posiblemente tomarán a la gente por sorpresa”, dijo Lincoln mientras Morgan le apoyaba la mano en el hombro. Según lo que sucede en el cómic, el ejército de aliados formado por Rick y los ciudadanos de Alexandria, el Rey Ezekiel (Khary Payton) y los habitantes de El Reino, y Maggie, quien está a cargo de Hilltop, vencerá a Negan, lo encerrará en una cárcel como ejemplo de reinstauración de la seguridad social en un mundo apocalíptico rodeado de zombies (ver recuadro). Antes de que el villano sea sentenciado a prisión, acabará con Alexandria en una explosión y sus integrantes deberán abandonar la ciudad.

Pero la parca no sólo le pisa la sombra a Grimes sino a todos los personajes principales, y habría algunas bajas en la gran batalla ¿Será Maggie (Lauren Cohan), Carol (Melissa McBride), Michonne (Danai Gurira) Daryl (Reedus), Carl (Chandler Riggs), Tara (Alanna Masterson), Eugene (Josh McDermitt), Morgan (Lennie James), Rosita (Christian Serratos), Gabriel (Seth Gilliam) o Aaron (Ross Marquand)? Kirkman, en el rol de coproductor ejecutivo, terminó de confirmarlo en Nueva York: “Acabamos de arañar la superficie de este mundo. No queremos seguir adelante sin Rick Grimes, pero de nuevo, en el año 20, en el año 30, ¿quién sabe? Perdemos actores estupendos y personajes fabulosos porque eso es parte de la narrativa y siempre estamos obligados a seguir adelante y encontrar una manera de hacer que éste sea el mejor espectáculo posible después de perder a la gente. Así que no creo que ningún programa esté más preparado, tristemente, para perder a la gente que The Walking Dead. Cómo el espectáculo sigue y sigue, ¿quién sabe? Pero también estoy seguro de que lo haremos de una manera que sólo añade a la narración y sólo hace la historia más rica para perder a estas personas increíbles”. Dillon y Abbud se sumaran al reparto con nuevos personajes vinculados a Alexandria, y la líder chatarrera Jadis (Pollyana McIntosh), la joven Enid de Alexandria (Katelyn Bacon) y Simon (Steven Ogg), reclutador de la cuadrilla de provisiones que les quitan a otras comunidades y mano derecha de Negan, firmaron contrato para ser plantilla estable de TWD, por lo que tendrán muchas escenas y larga vida por al menos los próximos 16 episodios.

El estreno será con el capítulo cien –todo un récord para una de las series en la nueva era de las multiplataformas–, y desde el principio será impactante: Rick Grimes llegaría al Santuario de Negan, cuartel en el que nunca puso un pie y en el que Eugene vive al pasarse al bando de Los Salvadores, y en el que haría balas para los soldados de Negan. Así lo reveló una fotografía subida por el actor Daniel Newman, quien interpreta a uno de los soldados de El Reino, dentro de la escenografía de los estudios ubicados en la ciudad de Atlanta. Dwight, miembro de Los Salvadores, a quien Negan le quitó a su esposa, lo traicionará luego de atacar Hilltop y confirmarle la mentira de que Rick está muerto.

Finalmente, Kirkman confirmó que habrá un crossover con Fear the Walking Dead, el spin-off de The Walking Dead de la cadena AMC pero que se desarrolla en el oeste y sur de Estados Unidos. Será en 2018, es decir, en la segunda entrega de ocho capítulos de la octava temporada. “Voy a decir esto: Hay dos series de The Walking Dead. Un personaje va a ir de un show que no voy a nombrar y aparecerá en otro show que no voy a nombrar. Por fin hemos llegado a un lugar con la otra historia, donde podemos jugar con algunas cosas”, aseguró. Falta develar qué intérprete va a interactuar con la otra serie.

The Walking Dead se despidió de la séptima temporada con el capítulo The First Day of the Rest of Your Life (El primer día del resto de tu vida) que despertó críticas en los fanáticos que esperaban la guerra contra el villanísimo Negan, sin embargo el relato cayó en un pozo, fiel reflejo de los 16 episodios: muy psicológica, dramática, estratégica, poquísima acción, y muy lejos del prisma de la serie: la amenaza de los zombies. Midió menos que en los epílogos de las temporadas 4, 5 y 6, con un promedio de 11,9 millones de espectadores en Estados Unidos (ver recuadro), donde tuvo un arranque fabuloso de 17 millones de fanáticos, y la mitad de los episodios (ocho) estuvieron apenas por encima de los 10 millones, promedio que no tenía desde la tercera temporada. TWD viene en baja pero no pierde la corona de ser la serie más vista del mundo al emitirse por cable sin pagar adicional, algo que sí sucede con otras cadenas como HBO. La “guerra sin cuarteles” empezará en ocho días, con muertes inesperadas, traiciones, y calentará el rating mundial durante 67 minutos. “La guerra se resolverá definitivamente para el final de la temporada 8”, aseguró Scott M. Gimble, creador de TWD.

Lo que adelanta la historieta

El cómic original que –escrito por Robert Kirkman y dibujado por Tony Moore y Charlie Adlard– comenzó su andadura allá por octubre de 2003 tiene muchísimas similitudes con la serie original, y también notables diferencias. De estas últimas, un ejemplo arrollador: hoy el protagonista Rick Grames vive en pareja con Andrea, que en la serie murió al final de la tercera temporada.

Aun con esos desencuentros, es factible divisar numerosas líneas de continuidad que permiten dilucidar el derrotero de lo que podrá verse en la pantalla chica. Esta temporada al menos comenzará con lo que en la historieta fue la saga All Out War, el enfrentamiento no tan final entre las huestes de Rick y las del villano Negan. En las páginas del noveno arte, el malvado era derrotado: cuando todo parecía indicar que se iban a matar entre todos, Rick solicitaba un encuentro con su enemigo delante de todos y le planteaba que era absurda tanta matanza cuando podían colaborar en conjunto para acceder a un mundo mejor, para que cuando Negan cediera y aceptara la paz el protagonista tomara prisionero al villano por sorpresa. Todo el discurso era para los hombres de Negan, para que ellos sí trabajaran en equipo mientras su jefe no era condenado a muerte sino encarcelado de por vida para demostrar, simbólicamente, el retorno a la civilización.

La historieta luego hace un salto de varios años para mostrar el mundo que ya se reconstruye, donde los zombies son una amenaza mucho menos feroz y donde Negan está prisionero en el sótano de la casa de Rick, cuyo hijo comienza a mostrar la rebeldía propia de los adolescentes. La amenaza que surge entonces son aquellos que eligieron vivir entre los zombies imitándolos, los “susurradores”, que comienzan a verse en la serie hermana, Fear The Walking Dead. De donde es posible deducir para qué lado apuntará el anunciado cruce entre ficciones.