Entre Buenos Aires y París; entre el español, el francés y el italiano; entre el canto y la actuación; entre público adulto y público infantil: por allí transitan mis trabajos artísticos. Recientemente, junto a Marcos Montes, hicimos Deshonrada, en el Centro Cultural San Martín, escrita por Gonzalo Demaría y dirigida por Alfredo Arias. Se trata de una obra basada en un hecho histórico sucedido en plena Revolución Libertadora. Gira en torno a la figura de Fanny Navarro, actriz que conoció la fama en plena década del 40, quien fue amante de Juan Duarte y amiga íntima de Eva Perón: es arrancada de su domicilio en plena madrugada, luego trasladada al Congreso de la Nación y, en una ominosa oficina, el siniestro Capitán Gandhi la somete a un interrogatorio del que saldrá deteriorada psíquicamente. Este trabajo acaba de recibir la nominación a los premios ACE en el rubro Actriz Protagónica en Drama y/o Comedia Dramática, lo que me genera muchos sentimientos. Por un lado, es muy placentero ser reconocida por lo que uno hace, sobre todo, en esta obra en la que se habla del fanatismo. Por otro lado, abrir los ojos ante su sufrimiento y su historia trágica nos permitió, paradójicamente, inspirarnos para crear un hecho estético.
eshonrada tuvo muy buenas repercusiones, entre otras razones, porque opino que se logró un trabajo acabado de parte de todos los rubros que intervienen en el proyecto. Asimismo, creo que también hay un público que agradece las obras de corte histórico: son una manera lúcida de reflexionar y revisar nuestro pasado. Repondremos esta obra a mitad de agosto en Buenos Aires, en el Centro Cultural San Martín y la haremos en París, el año que viene.
Cuando estoy en Francia, me traslado también idiomáticamente. El idioma que le sigue a mi lengua madre es el francés. Lo aprendí y lo sigo aprendiendo para participar en obras con Alfredo Arias, aunque confieso que los trabajos sobre music hall que hicimos con él fueron transitados también en inglés, pasando por el japonés, el español y el italiano. Todo esto implica un entrenamiento severo y una flexibilidad que me propone estar predispuesta al cambio.
Es importante destacar que hay en nuestro país colegas formadísimos y talentosísimos en el ámbito del teatro musical, algunos de los cuales están en Shrek, la única gran producción musical al estilo Broadway que hay en este momento. La Argentina, en este período, carece de producciones que permitan la inserción de la enorme cantidad de profesionales que se forman en escuelas de teatro musical. Por eso, sueño con que el Estado genere y sostenga un elenco estable de teatro musical; sueño con la vuelta del Elenco Estable del Teatro San Martín, de la Comedia Nacional del Cervantes; sueño con recuperar esos espacios arrebatados, más que necesarios para el desarrollo y formación del actor en todas sus especialidades. Los teatros son tan ineludibles para los actores como para el público. Incluidos en él, los niños, importantísimos espectadores. Lo cierto es que para mí los niños son un universo extraño y fascinante, y por eso prefiero observarlos de lejos. No obstante trabajé con el maravilloso Hugo Midón en varios espectáculos, como La trup sin fin y El salpicón. Sus obras, inteligentísimas, ubicaban al niño en un lugar lejano de las distracciones pochocleras. La educación del espíritu, a través de la buena música, la buena literatura y los buenos ejemplos, nos propone, además, la integridad como seres humanos. Como decía Mozart, “si uno pudiese sentir el poder de la armonía”, este hecho metafísico seguramente educaría el espíritu de manera inductiva. Los espectáculos lúcidos y acabados artísticamente pueden ser disfrutados por adultos, por niños, y ambos a la vez. Tal es el caso del ballet El carnaval de los animales, que se presentará en el Parque Centenario, con música de Camille Saint-Saëns, textos de María Elena Walsh y dirigida por el hacedor incansable: el coreógrafo Oscar Araiz (con el cual tengo la dicha de trabajar por primera vez en mi carrera). Expresiones como ésta quizás estén lejos de lo que se ve en la televisión, pero para eso estamos: para ofrecer paisajes distintos que colaboren para expandir el espíritu de grandes, de chicos y de todo el público.
* Actriz, cantante. Integra el elenco de El carnaval de los animales, de Oscar Araiz, con el Grupo de Danza de la Unsam,
que se presenta 18, 25 y 26 de julio y 1º y 2 de agosto en el Anfiteatro Eva Perón Parque del Centenario (Av. Leopoldo Marechal y Lillo). Entrada libre y gratuita.
