Hubo una noche que no fue mágica para Tan Biónica. Fue el 4 de abril del 2013: un fuerte temporal de vientos y lluvias azotaron Capital Federal que terminó con inundaciones, evacuados y otros tantos secuestrados y retenidos en sus casas por el agua. Tan Biónica sufrió –al igual que otros vecinos– grandes pérdidas por el más de un metro de agua que ingresó al estudio y sala de la ensayo del barrio de Saavedra, ubicado sobre la calle Jaramillo. Ese día los hermanos “Chano” (voz) y “Bambi” (bajo) Moreno Charpentier, Diego Lichtenstein (batería) y Sebastián Seoane (guitarra) vieron el deceso de sus instrumentos, amplificadores, micrófonos, pedaleras, y la MAC que funcionaba como cofre de sus experimentos sonoros. Nada irrecuperable, sostuvieron bajando el dramatismo, y al día siguiente actuaron gratis en un recital que organizó Red Solidaria a beneficio de los damnificados. “Chano” le comentó de casualidad lo sucedido a Guadalupe Mujica Cerati, sobrina de Gustavo Cerati, y sin esperarlo les ofreció mudarse al Estudio Unísono, la sala-estudio que creó Cerati para la última etapa de Soda Stereo y que fue centro de operaciones de la exitosa carrera solista de Cerati. Dos meses después de la inundación, Tan Biónica alquiló la emblemática sala-estudio de Vicente López, que fue testigo del nacimiento de Hola mundo, la cuarta criatura biónica.
—Mientras armaban el CD falleció Gustavo. ¿Hay un halo de Cerati? ¿Sienten algo?
CHANO: Preferimos pensar que no. No vinimos a buscar nada de misticismo o de la historia de Soda. Vinimos a buscar capacidad técnica porque él era el chabón más pro que había en este país para armar cualquier cosa.
DIEGO: Considerábamos que era el lugar indicado por el momento que estamos atravesando, creciendo a nivel infraestructura, un súper home-estudio que Gustavo creó para él, que está hecho para su medida, y que es para la medida de este grupo que está activo. Queremos seguir escribiendo historias en este lugar. Estuvo Soda, buenísimo, ya está. Ahora está Tan Biónica, que hicimos el disco y ensayamos acá.
—¿Se dan cuenta cuándo una canción será un hit?
SEBASTIAN: A veces se siente. Siempre hay una melodía que decís “ésta va a pegar”. Me acuerdo cuando Chano trajo Ciudad mágica, me pasó algo extraño, y ahora me pasó con (el primer corte) Hola mi vida.
CH: Me pasó con La melodía de Dios, y con Hola mi vida. Sabía que iban a pegar. Con Ciudad mágica no estaba el arranque “pa pa pa”, y después lo puso Bambi, y sin ese arranque tipo David Guetta la canción no hubiera sido lo que es.
—Le dieron la música a la publicidad de Beldent, ¿qué relación tienen con las marcas?
CH: Siempre tuvimos una actitud contraria al rock. Pensamos que nos es mucho más funcional no ser comunistas y odiar a las marcas, y que a través de ellas podemos dar más cosas de calidad a los fans. Nuestra relación con Beldent arrancó en un Random Fest que fue un show gratis, que hay que agradecerlo, y también gracias a Budweiser pudimos hacer un show para cien mil personas. Nosotros somos funcionales a las marcas y a lo que ellos nos piden porque ponen un montón de plata y nos permiten hacer cosas que a nuestros fans les salen gratuitas.
—El PRO utilizó “Ciudad mágica” en el festejo de las PASO. Macri lo bailó con euforia. ¿Le pidieron el tema?
BAMBI: No se pide permiso, las canciones son de libre uso. Al menos que uno se oponga, pero nosotros nunca nos vamos a oponer.
CH: Tiene más onda que aparezca un chabón bailando así, que resulta divertido verlo de la manera que lo baila, antes que escuchar un discurso político aburrido. Mauricio Macri es un tipo que baila una canción nuestra, que es jefe de Gobierno, que aspira a ser presidente, que tiene una hija, pero nosotros no tenemos nada que ver con el PRO. Soy amigo de Manu Quieto (líder de La Mancha de Rolando), y nunca voy a estar de acuerdo con prohibir una canción (Quieto es amigo de Amado Boudou e hizo prohibir Arde la ciudad en los actos del PRO).
—La Mancha de Rolando, por ejemplo, es una de las bandas que tienen un compromiso militante por el Gobierno, ¿cómo ven este tipo de vínculo música-política?
B:La música es otra cosa, pasa por otro lado, nunca tuvo que ver con la política. Al que le sirve, le gusta y le conviene que lo haga... Nuestro lugar en la sociedad es entregar música para que te acompañe, para festejar o deprimirte, y querer ocupar otro lugar es muy pretencioso, como bajar línea, o a quién hay que juzgar, al que roba, al político. No. De eso que se ocupen otros.
—Hubo dos polémicas fuertes en la historia de la banda: un tuit de Chano diciendo que el público de Tan Biónica no usaba bengalas (el cual fue criticado por los fans de Callejeros), y las declaraciones de Chano de que el Indio Solari como solista no tiene un hit. ¿Cómo lidiaron con estas polémicas?
CH: Odie quien me odie, esas cosas son así. El (lo señala a Diego) estuvo en Cromañón, no tenemos nada contra Callejeros, nunca dije nada en contra de ellos, nunca escuché los discos de Callejeros, no tengo mala onda con Pato (Fontanet), ni lo conozco. Siempre dije que nunca van a estar las bengalas en el mismo lugar en que yo esté, y si hay las voy a hacer apagar, porque es un ritual pelotudo. Y con lo del Indio, yo no dije eso que se publicó, estuvo sacado de contexto, aunque sí salió mucha gente a bancarme. Dije muchas experiencias lindas sobre Los Redondos, estuve en River. A mí me gustaban Los Redondos, después dejaron de gustarme. Después de ese quilombo me quedé medio con miedo diciendo “mirá si el Indio me sale a contestar, hago un pozo en mi jardín y me meto adentro”.
Hola mundo se unifica con 11 canciones, y Juanes es el invitado especial del CD en Un poco perdido. Fue una idea pergeñada por los mismos integrantes de TB. “Fue un sueño. Juanes no tiene el reconocimiento en Argentina que tiene en todo el mundo”, analiza Chano. Su hermano agrega: “Compartimos escenario en unos premios, y después nos fuimos a comer juntos, llevamos auriculares y se lo enchufamos directamente en los oídos para que escuchara el tema. Se enamoró, y a partir de ahí empezó una relación y esta colaboración que es una iluminación, es un referente que nos distingue”.
Tan Biónica viajó el 25 de mayo a México, el gigante epicentro de mercado artístico latino a dos horas de EE.UU., y estará de gira-promoción hasta junio en tierras aztecas. El cuarteto coincide que no buscan más dinero, ni cobrar cachet en dólares, sino que “las canciones sean conocidas por el universo”. “De acá a cinco años, cuando se cumplan diez de continuo crecimiento, instalaremos a Tan Biónica. Haremos allá lo que hoy hacemos acá”, proyecta Chano. Y el sueño es inmenso. Desde grabar con Vampire Weekend (“no encontré mejor disco hasta ahora”, dice el cantante), y hasta con un ex Beatle: “Paul McCartney –desea Diego–. Ojalá que siga vivo. Juanes en su disco grabó con el bajista y baterista de McCartney. Estamos a un paso”.
Amar a Juana Viale
“Estamos muy bien. Enamorados”. El frontman de Tan Biónica no oculta lo que siente por Juana Viale, ni en los medios, ni en las redes sociales con el cruce de tuits. “Obvio que la vi en el ‘Bailando’ –cuenta Chano. Bailó muy bien. Estar ahí parado debe ser muy potente, difícil, te genera nervios, más si es para bailar porque la mayoría de la gente que está ahí no suele bailar”. Pero Chano –a diferencia de Calamaro y Breque en la temporada pasada– prefiere ausentarse de Ideas del Sur y alentar a su novia desde casa. “Nunca voy a ir (al piso). Me parece que pasa por otro lado, no es algo que entienda bien cómo funciona... un día tenés un candidato a presidente y otro día al Mago sin dientes. Seguramente este año haremos algo con la banda porque Marcelo es un número uno y es amigo nuestro. Siempre se portó bien con nosotros, y quedó copado en el recital del año pasado en el Hipódromo y por eso después nos invitó al último programa. Es más, esta temporada cierra con un tema nuestro (Hola mi vida)”.
—Veían antes “ShowMatch”?
CHANO: Sí. Siempre que puedo. Me parece un programa increíble y lo más parecido a Las Vegas que tenemos en este país. Pasa de todo. A veces me parece aburrido, y otras veces hay que mirarlo porque estará el futuro presidente, y otras veces te enganchás con alguna cosa que pasa.
—Saliste con Celeste Cid y ahora con Viale. Todas mujeres conocidas del medio. ¿Cómo lo llevás con los paparazzis?¿Te jode?
CH: No me jode, de hecho me lo busco así, debe haber algo en ese métier que me llama la atención. Es la gente que uno tiene alrededor, uno no elige de quién se enamora.
