Los rumores que indican que Tiger Woods se habría internado en una clínica para adictos al sexo son cada vez más fuertes. Tras divorciarse de su ex mujer -y perder 300 millones de dólares en el proceso- el golfista más famoso del mundo habría decidido iniciar un tratamiento para solucionar su problema.
Tiger Woods se encontraría internado en la lujosa clínica Pine Grove, ubicada en la ciudad de Hattiesburg, en el estado sureño de Mississippi, según confirmó Benoit Denizet - Lewis, un periodista y adicto al sexo recuperado, al diario New York Daily News. "Solemos bromear o decir que no es una adicción de verdad, pero es un problema grave y real", explicó el periodista.
El centro de rehabilitación ofrece un programa intensivo de seis semanas para tratar adicción al sexo, combinados con otras adicciones, que incluye terapia grupal, asistencia psiquiátrica y apoyo familiar, entre otros. Los pacientes firman un "contrato de celibato" que prohibe toda actividad sexual, incluyendo la masturbación, durante el tratamiento.
El tratamiento puede ser duro para el golfista. "No podrá salir y jugar al golf en la mañana, tendrá que hacer como todos los demás pacientes: levantarse temprano, comer la misma comida, y atravesar las mismas emociones", sostuvo Denizet Lewis, quien sostiene que se trata de "una experiencia realmente intensa".
El periodista cree que la adicción al sexo puede ser tanto o más complicada que una adicción a las substancias. "Podés dejar una bebida o las drogas y no tener que verlas, pero no podés ir a ningún lado sin tus genitales o tu cerebro", sostiene.