Un pequeño gigante. Así definimos a Franco Masini (23) que con su corta edad tiene un curriculum del que vale la pena hacer alarde. El actor y cantante argentino saltó a la fama luego de interpretar a Pedro Correa en la telenovela Esperanza Mía, y conquistó al público más adulto al ponerse en la piel de Guillermo Puccio, en la película El Clan protagonizada por Guillermo Francella.
En el 2017 se puso en la piel de Nicolás en Amar Después de Amar, y se convirtió en Toni para Cuéntame cómo pasó, una serie de la TV Pública que se estrena este mes. Con más de 290.000 seguidores en Twitter y más de un millón en Instagram, Franco se encuentra al frente de la obra Marco Polo, un espectáculo para toda la familia que se presenta en el Teatro Maipo.
—¿Cómo ves la situación del ámbito teatral en la argentina?
—Yo creo que ha atravesado una crisis pero este es el año en el que está repuntando. Se puede ver con el número de espectadores en la mayoría de los espectáculos. Hay un montón de tanques teatrales y eso esta buenísimo porque está muy fuerte lo que es la industria para nosotros como actores y y eso implica también más trabajo.
—¿Qué fue lo que más te tentó del proyecto de Marco Polo?
—Primero que es una obra muy exigida tanto vocal como actoralmente. Requiere mucha destreza física y eso es algo que me tentó mucho, el preguntarme “¿puedo hacer eso una hora y media?, ¿puedo estar peleando, cantando, volando y tirándome al piso?”. Además, el libro y el mensaje de la obra también es muy lindo. Es una obra para toda la familia y es lindo que puedan venir los padres con los chicos y que ellos también se puedan entretener. También la calidad del vestuario, de las pantallas, de los vuelos… Está buenísimo que uno como actor pueda contar con eso y aprovecharlo.
—¿Cómo fue la preparación? ¿A qué desafíos te tuviste que enfrentar?
—Tuve que preparame mucho con el Kung Fu. Es una obra donde hay muchas peleas y que requiere mucho timing en cuanto al tiempo de música con acción física. Por ejemplo, una piña entra con una batería entonces vos tenés que estar preparado para hacer el movimiento justo y exacto en el tiempo para que salga todo bien. Todos los movimientos requieren de mucha planificación.
—Marco Polo es tu primer gran protagónico…¿Cómo lo vivís cada vez que salís al escenario?
—Bien, muy feliz y disfrutando cada momento. Intento aprovechar cada función y aprender de mis compañeros, del equipo y de mi directora que vienen hace años haciendo musicales y la tienen clarísima. Intento absorber todo lo bueno para poder ir construyendo mi camino.
—Candelaria Tinelli, tu novia, vino a verte y tiene una mirada muy artística…¿Qué devolución te hizo?
—Le gustó mucho. Le gustó la calidad de la puesta, del vestuario, de las proyecciones, del mapping, de todo lo que es pelea. Obviamente sabía que era para toda la familia, pero lo disfrutó mucho.
—¿Ya hubo alguna presentación formal con la familia?, ¿Cómo te llevas con Marcelo?
—De eso prefiero no hablar.
Carla Calabrese, la directora
—¿Qué te inspiró a elegir “Marco Polo”?
—Marco Polo tiene una visión muy fuerte sobre lo que es el respeto hacia las diferentes culturas. La obra viene en un momento muy especial para la sociedad y ver algo reflejado en el escenario te hace reflexionar.
—¿Qué es lo que te atrae de hacer tantas producciones juveniles?
—No sé por qué siempre estoy relacionada a lo juvenil. En realidad nosotros no hacemos nada pensando que es para chicos, aunque entiendo que los shows que vengo haciendo siempre son familiares. Son las historias que nos gustan contar y la manera en la que nos gustan verlas.
—¿Qué te hizo pensar en Franco Masini?
—La verdad que no veo mucha tele y cuando surgió esto yo no asociaba al actor. Me sonaba el nombre pero no tenía mucha idea de quién era pero la autora sí y sabía que él podía hacer Marco Polo perfectamente. Así que lo empecé a mirar, lo entrevisté y la verdad que no nos equivocamos para nada. Franco le puso la energía exacta y se conectó con el aventurero que tiene en él. Además, es un amor de persona.