F.G.
Una vez más, y ya son siete de manera ininterrumpida, el mejor cine español se acerca a los espectadores argentinos a través de Espanoramas, la muestra organizada por la Embajada de España y los Centros Culturales de la Cooperación Española en Argentina (Centro Cultural de España en Buenos Aires, Centro Cultural Parque de España en Rosario y Centro Cultural España-Córdoba), en colaboración con el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), del Ministerio de Cultura y Deportes de España.
Como en cada una de las seis ediciones anteriores, los protagonistas de la muestra son dos: por un lado, 13 de los mejores films españoles recientes, seleccionados por Fran Gayo; por otro, el público argentino, siempre atento a la producción cinematográfica de nuestro país. La programación mantiene su apuesta por la calidad y la diversidad como señas de identidad y demuestra que aquella nueva generación de cineastas españoles que despuntaba hace algunos años es ya una auténtica realidad.
Con el propósito de responder al desafío que para todos representa la pandemia, Espanoramas se presenta por primera vez en una edición virtual que permitirá que los espectadores puedan acceder a los títulos desde cualquier punto de Argentina.
Si bien Espanoramas supone cada año un hito para la presencia de nuestro cine en Argentina, no será el único. En este 2021 se cumplen cien años del nacimiento de dos figuras centrales del cine español del siglo XX: los geniales Luis García Berlanga y Fernando Fernán Gómez. En los próximos meses, la Embajada y los Centros Culturales de España conmemorarán a través de diversas actividades tan señaladas efemérides.
Deseamos, por fin, que la muestra de cine español sirva, en especial en las difíciles circunstancias que atravesamos, para seguir reforzando el vínculo de los espectadores argentinos con nuestro cine y contribuyendo a esa sucesión de intercambios y miradas recíprocas a través de la cual se construyen las relaciones entre dos países culturalmente tan cercanos como Argentina y España.
*Programador de Espanoramas.
L.M.B.
Hace algo más de un año despedíamos la sexta edición de Espanoramas con O que arde. La película se proyectó el 11 de marzo de 2020 con aforo completo en una de las salas grandes de Cinépolis Recoleta.
Catorce meses después, resulta muy difícil mirar hacia atrás y evaluar lo vivido desde entonces sin tener la sensación de que este año nos ha pesado a todos y todas como si fuese un lustro. Los festivales, eternos depositarios de la responsabilidad de rescatar todo ese cine valioso que nunca llega a estrenarse comercialmente, se han visto obligados a reinventarse con drásticos recortes de programación y aforos (cuando ha habido aforos), reduciendo a veces sus propuestas a la mínima expresión. En este contexto llega una nueva edición de Espanoramas, una edición que, inevitablemente, no es otra más, una edición que viene con una alarma encendida, es más que nunca una edición de resistencia, de seguir programando, apostando, divulgando, y todo ello “a pesar de”.
Desde 2015 venimos insistiendo en la idea de esta muestra como una toma de temperatura a la realidad de lo que viene sucediendo en el ámbito del cine que se hace en España cada nueva temporada. Y en 2021 ese componente sigue ahí, es decir, resultaría imposible hacer un recorrido por lo que han supuesto estos últimos 12 meses para el cine español sin mencionar a Luis López Carrasco, Pilar Palomero, Nuria Giménez, Margarita Ledo o el eterno Pedro Almodóvar.
Persiste además la idea de un cine español abierto, plural no solo en cuanto a propuestas formales, géneros o acercamientos diversos a la realidad. Es también un cine que nos habla desde Catalunya, Galicia o Asturias, que traza emocionantes correspondencias que atraviesan océanos, que viaja a la Sierra Maestra cubana o que, con insistencia, vuelve al pasado para tratar de decodificar este presente que cada vez se nos hace más insondable. Es un cine, en definitiva, tenaz, que se sabe continuador de una noble tradición y que incluso en la actual coyuntura niega la posibilidad de que las películas se vean reducidas a ser simplemente “contenido”.
**Consejero cultural de la Embajada de España en Argentina.