El día de la presentación de prensa de Dulce amor, donde María Valenzuela se luce como actriz en la novela de Telefe que el jueves pasado alcanzó los 18,5 puntos de promedio, no tenía ánimos para hacer entrevistas.
Se la ve muy delgada, tal vez por las circunstancias que le tocan: "Hoy como por obligación –confesará–, pero tengo cerrado el estómago".
Lucía impecable, y con una sonrisa pidió un poco más de tiempo para sentarse a conversar. Algo lógico, era imaginable que en el diálogo surgiera el tema de la muerte de su ex marido y padre de sus tres hijos (Malena, Julián y Juan), Juan Carlos "Pichuqui" Mendizábal, a causa de un cáncer de hígado (el 4 de enero de 2012) y su familia hoy está haciendo el duelo. "Tengo bajas las defensas –afirma Valenzuela– y estoy un poco taquicárdica".
