Luis Majul regresa este domingo con la temporada número 13 de La Cornisa. Y desmesurado, a caballo de varios proyectos en radio, televisión y gráfica, vende un periodístico que "no hace oficialismo pero tampoco oposición". El debut, a las 21:30, tendrá una variante este año: se extenderá, por decisión del canal, media hora más.
Los primeros invitados serán Martín Redrado y Jorge Lanata: "Para mí, es todo un símbolo Jorge. Somos contemporáneos, tuvimos diferencias, pero hoy constituye un símbolo o una señal, como para decirlo de una manera menos grandilocuente".
El nuevo año de La Cornisa contará, entre sus filas, con María Helena Ripetta en policiales y Hernán Capiello, en política y judicial, además de la participación de Ignacio Girón (finalista del Octavo Integrante en CQC) que el domingo abrirá con un informe sobre los gastos del presupuesto en la provincia de Formosa.
Majul dice que no busca estar "ni de un lado ni del otro. Si hay una tapa de los grandes diarios que solamente aspira a lastimar al gobierno sin argumentación o aspira a instalar un tema para negar otro, tampoco voy a hacer eso. Voy a hacer lo que tiene que hacer un periodista: periodismo".
- Perfil.com: En un año electoral, ¿sentís algún tipo de presión? Francisco De Narváez, accionista del canal, ha estado muchas veces en tu programa.
- No, eso es un error. En mi programa estuvieron muchas veces Elisa Carrió, Luis Juez y muchas menos De Narváez, si querés contamos la cantidad de veces. Para este programa invité a Florencio Randazzo, que espero que venga y durante todo el año pasado invitaba cada domingo a Aníbal Fernández. Muy pocos decidieron venir porque eso también es una decisión política: 'Le vacío el programa de dirigentes oficialistas porque quiero que tenga una imagen de antikirchnerismo', ¿entendés?
- ¿Pero creés que es sólo eso? Ellos van a A dos voces sin ningún problema y allí son igual de críticos que vos.
- Bueno, preguntale entonces por qué no querrán ir. Yo tengo la constancia de que los invité. La primera invitación oficial es a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y ojalá que venga. Eso tampoco me va a hacer kirchnerista: los mejores dos años del gobierno de Néstor Kirchner, desde 2003 a 2005, fueron los mejores de toda la transición comparados con cualquier gobierno desde que empezó la etapa democrática en 1983 con (Raúl) Alfonsín. Ahora, como hace años vienen manipulando mis dichos, seguramente mucha gente se va a sorprender con lo que digo.