Moscú - El partido del presidente Vladimir Putin, Rusia Unida, cumplió los pronósticos y logró una abrumadora victoria en las legislativas, con más del 60% de los votos, según resultados oficiales parciales, lo que supone un espaldarazo a los planes del jefe del Estado. Con el 19,5% de los votos escrutados, Rusia Unida lograba un 63,5% de los sufragios, según la Comisión Electoral Central.
Los sondeos a pie de urna de los institutos Vtsiom y FOM le otorgaron un porcentaje similar, que oscilaba entre un 61 y un 62,3% de votos. "Estas elecciones eran un referéndum de apoyo a Vladimir Putin y podemos decir que Vladimir Putin ha salido victorioso", declaró el jefe de Rusia Unida, Boris Gryzlov.
A su formación le sigue el Partido Comunista (PC), con un 11,3%, según los sondeos y los resultados parciales publicados por la noche.
Pero el líder del PC, Guennadi Zyuganov, dijo que estos resultados "son un fraude escandaloso" y denunció una "ola de violaciones" en los comicios. De los 11 partidos que se presentaban, cuatro superan el listón del 7% necesario para entrar en la Duma: Rusia Unida, el PC, y también los ultranacionalistas pro Kremlin (LDPR) de Vladimir Jirinovski y el partido de izquierda pro Kremlin Rusia Justa, según los datos preliminares.
El LDPR obtiene un 10% de los votos, seguido de Rusia Justa, el partido del presidente del Consejo de la Federación (Cámara alta del Parlamento) Serguei Mironov, con el 7% de los votos. La oposición liberal, poco representada en la asamblea saliente, quedó de
nuevo apartada: Iablako obtiene entre el 1,2% (resultados parciales oficiales) y el 2,8% (sondeos) y los liberales del SPS entre un 1,1% y un 1,6%. Desde Kaliningrado, a las puertas de Europa, hasta el lejano Vladivostok, en la costa del Pacífico, 109 millones de rusos estaban llamados a elegir a los 450 diputados de la Duma (la cámara baja del Parlamento), para un mandato de cuatro años.
Pero ante todo, los comicios eran en la práctica un plebiscito para Putin, pues --hecho inédito en la historia rusa--, el propio presidente encabeza la lista de Rusia Unida. Y esta aplastante victoria le dará la legitimidad que pedía para mantener su "influencia" después de que abandone el Kremlin, en marzo del 2008, ya que no puede presentarse a un tercer mandato presidencial según la ley rusa.
Lo único que atormentaba a Putin, la participación, superó el 60%, según un responsable de la Comisión Electoral Central. Desde Vladivostok a San Petersburgo, numerosos jubilados, funcionarios y militares votaron por Rusia Unida recalcando que lo hacían porque el nivel de vida había mejorado bajo la presidencia de Putin tras la crisis financiera de la década de los noventa.
"Voté por Rusia Unida, ya que al menos ahora pagan las jubilaciones", explicó Raissa Nikolaevna, de 69 años, en Istra, en la región de Moscú. Del lado de la oposición, las denuncias de fraude no se hicieron esperar. El jefe de los servicios jurídicos del PC, Vadim Soloviev, anunció un recurso inminente "para impugnar los resultados", según la agencia Ria Novosti. "La ola de violaciones supera todas las normas", añadió en alusión a las 10.000 presuntas irregularidades que les comunicaron 300.000 observadores del partido. También la mayor organización rusa que ejerce de observadora de las elecciones, Golos, indicó haber constatado numerosas irregularidades.
La Comisión Electoral Central rusa anunció haber registrado infracciones, pero no dio apenas detalles, señaló la agencia Ria Novosti.
Las dos principales misiones occidentales presentes, enviadas por las Asambleas Parlamentarias de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) y del Consejo de Europa, no constataron infracciones. En el extranjero, se puso en duda la transparencia incluso antes del cierre de los colegios electorales. La canciller alemana Angela Merkel lamentó "las restricciones a la libertad de expresión".
Fuente: AFP