El ataque suicida, dirigido contra el gobernador de la provincia de Nimruz,
mató al hijo del funcionario y a varios miembros de su custodia. Otras
13 personas resultaron heridas en la explosión.
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Cedoc
Un atentado suicida dirigido contra el gobernador de la provincia de Nimruz, en el oeste de Afganistán, causó hoy ocho muertos, entre ellos el hijo del gobernador, y dejó trece heridos, informaron las autoridades.
Los otros fallecidos son miembros de la custodia del mandatario y el atacante, según informó el propio funcionario atacado, Gholum Dastagir Azad.
El agresor detonó la carga explosiva que llevaba adherida a su cuerpo junto a la puerta de la oficina del gobernador en Zaranj, la capital de la provincia.
"Yo era el objetivo de un terrorista suicida", indicó Azad, según la agencia Europa Press. El funcionario había entrado en el edificio pocos minutos antes.
Azad responsabilizó del atentado a la milicia islamista talibán, que lleva a cabo una sangrienta guerra contra el gobierno afgano del presidente prooccidental Hamid Karzai. Los talibanes fueron expulsados del poder en diciembre de 2001.
El atentado se produjo en una provincia relativamente tranquila, que comparte una extensa frontera con Irán.
Mientras tanto, soldados afganos frustraron un atentado suicida en el oeste de Kabul en las primeras horas de hoy, cuando un hombre que llevaba un chaleco cargado de explosivos trataba de subirse a un autobús militar, informó el portavoz del Ministerio de Defensa, general Zahir Azimi.
" Los soldados le quitaron el chaleco de su cuerpo y entregaron al hombre a la policía", indico Azimi.
En lo que va de año, la milicia talibán llevó a cabo más de 130 atentados suicidas, por lo que 2007 ya es el año más sangriento en Afganistán desde la formación del gobierno respaldado por Estados Unidos hace unos seis años.
Más de 6.000 personas han muerto este año en incidentes relacionados con la insurgencia, una cantidad récord según datos de las autoridades afganas y de las fuerzas occidentales desplegadas en el país.
