La reina Isabel II de Inglaterra llegó este jueves a las 15.21 hora local al Vaticano para reunirse por primera vez con el papa argentino Francisco. Su llegada tarde condicionó el tiempo del que disponían para la entrevista en privado la cual sólo duró 17 minutos.
La reina, de 87 años, quien estaba acompañada por su marido, el duque de Edimburgo, de 92 años, fue aclamada por un grupo de personas que esperaban su paso por la Avenida de la Conciliación, de donde se accede a la plaza de San Pedro.
La soberana, vestida de lila y un clásico sombrero del mismo color, fue recibida junto con su marido en un salón anexo de la moderna sala de audiencias Pablo VI y no en el suntuoso palacio apostólico. El protocolo para la reunión entre los dos jefes de Estado fue aliviado debido a la edad de la pareja real británica. Luego de la breve entrevista en privado, se realizó el clásico intercambio de regalos.
La informalidad del encuentro habría sido el causante de que no se traten temas ríspidos como las Islas Malvinas, entre otros. "La voluntad de ambas partes es de que se trate de un encuentro informal, familiar", había adelantado el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi.
Por su parte, el embajador británico ante la Santa Sede, Nigel Baker, descartó indirectamente que el asunto haya figurado entre los temas a tratar y recordó que el Vaticano mantuvo históricamente la neutralidad sobre el asunto.
La visita de la reina al Vaticano coincidió con el 32 aniversario del inicio de la guerra de las Malvinas entre el Reino Unido y Argentina.