Santiago de Chile – La viuda del ex dictador chileno Augusto Pinochet y sus cinco hijos –procesados y encarcelados el jueves por malversación de fondos públicos– fueron liberados este sábado, luego de que la Corte de Apelaciones de Santiago ratificara la libertad provisional concedida el viernes.
Todos los hijos de Pinochet, Marco Antonio, Augusto, María Verónica, Jacqueline y Lucía salieron de los recintos penales donde estaban recluidos. La madre seguía internada en el Hospital Militar de Santiago, donde ingresó tras sufrir una descompensación cuando le notificaron su detención.
La Quinta Sala del tribunal confirmó por unanimidad el pedido que de oficio emitió el viernes el juez titular del caso, Carlos Cerda. “Se aprueba la resolución consultada del 5 de octubre de 2007, que concede la libertad bajo fianza de los encausados", informó el presidente de la sala, Juan Eduardo Fuentes.
El tribunal fijó un monto de 588 dólares de fianza para la viuda de Pinochet, Lucía Hiriart, y las tres hijas. En el caso de los dos varones y de una ex secretaria del dictador, el pago fue suprimido. “Marco Antonio y Augusto Pinochet Hiriart y Mónica Ananías, se les excluye de la obligación de rendir fianza", explicó el magistrado. "En el día de hoy ha reestablecido en parte el imperio del derecho", comentó por su parte el abogado Luis Pacull, defensor de Marco Antonio Pinochet.
Los abogados de la familia pagaron de inmediato las fianzas, por lo que en horas de la tarde los Pinochet salieron de las dos cárceles de reos comunes donde se encontraban detenidos. Las tres mujeres permanecieron en el Centro de Orientación Femenina (COF), donde durmieron las últimas dos noches, aisladas del resto de las reclusas, pero sometidas al mismo régimen de visitas y alimentación del penal.
"Pasaron una muy mala noche, pero ahora están tranquilas porque saben que fueron procesadas injustamente", relató María José Martínez, nieta del ex dictador e hija de Jacqueline.
Los hombres estaban en la cárcel Santiago 1, donde durmieron en la misma celda. “Esto es un raciocinio personal y este país debe pensar y analizar lo que está pasando", dijo Augusto Pinochet Hiriart al salir del penal.
La familia del ex dictador y 17 ex colaboradores fueron procesados el jueves por el juez Cerda, quien los acusó de malversación de caudales públicos desviados a cuentas bancarias en el exterior. Uno de esos 17 allegados fue eximido de prisión por razones de salud.
En su resolución, el magistrado acusó a la familia de Pinochet y a sus ex asesores de haber construido una intrincada red financiera para apropiarse de fondos públicos que fueron desviados a cuentas bancarias en el exterior, en su mayoría abiertas en el Riggs Bank de Miami y Washington. En total, la dictadura habría desviado durante 22 años unos 20 millones de dólares, que en la actualidad suman 26 millones por concepto de intereses y dividendos, según la resolución judicial.
Entre los ex asesores de Pinochet procesados figuran dos coroneles en servicio activo del Ejército, Juan Mac-Lean y Mortimer Jofré; su ex vocero, el general retirado Guillermo Garín; su abogado defensor Gustavo Collao (también militar retirado) y su ex albacea Oscar Aitken.
La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones, de turno este sábado, escuchó durante toda la mañana los alegatos de los abogados defensores de la más de veintena de encausados. “Es la persecución política más implacable en la historia de Chile, no en contra de una persona ni de un régimen, sino de una familia completa", dijo en tribunales el abogado Pablo Rodríguez, defensor de Lucía Hiriart.
El proceso contra la familia y los ex colaboradores del ex dictador fue abierto por presuntas maniobras fraudulentas entre la Presidencia, la Comandancia en Jefe del Ejército y la Casa Militar, encargada de gestionar fondos para las misiones militares en el exterior. Según la Justicia trasandina, el dinero del erario público era derivado a cuentas bancarias en el exterior, algunas de éstas pertenecientes a Pinochet, pero abiertas bajo otras identidades.
La investigación sobre la fortuna de Pinochet se inició en 2004, después de que el Senado de los Estados Unidos encontró dinero depositado a nombre del ex dictador en el Riggs Bank de ese país. La detención de la familia de Pinochet generó reacciones de la oposición contra el gobierno de Michelle Bachelet y acusó a la Justicia de no manejarse de manera independiente.
Ayer, Bachelet consideró estas manifestaciones como "un insulto" y consideró que quienes las formulan "aún no entienden que en democracia la Justicia es autónoma e independiente". La derechista Unión Demócrata Independiente (UDI) emitió ayer un comunicado que llamaba la atención sobre el hecho de que "al principal sospechoso (Augusto Pinochet) nunca se le logró probar un delito, y ahora se culpa a sus familiares y asesores más directos", algo que consideró "raro desde el punto de vista judicial".
Fuente: AFP y Télam
