Los nacionalistas de Convergencia i Unió (CiU) han ganado por amplia mayoría las elecciones catalanas, infligiendo la peor derrota de su historia a los socialistas, hasta ahora en el gobierno regional, que algunos interpretan como una advertencia al jefe del ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero.
Los primeros resultados parciales, con el 98% escrutado, dan a CiU, que contaba antes con 48 diputados, 62 diputados, colocándola a seis diputados de la mayoría absoluta de 68 legisladores.
"Se trata de una victoria histórica y demuestran que CiU ganaría ampliamente", aseguró David Madí, de CiU, en referencia a un resultado que supone un fuerte correctivo para el Partido Socialista de Cataluña (PSC), partido que obtuvo solo 29 bancas.
No obstante, pese a su amplia victoria, el líder de CiU, Artur Mas, necesitaría ayuda para gobernar y, en este sentido, sus declaraciones apuntan a buscar acuerdos puntuales para momentos específicos, más que pactos estables con otra formación.
Los socialistas, que encabezan el actual tripartito de gobierno junto a los eco-comunista de ICV y los independentistas de izquierda de ERC, perdería ocho diputados para tener 29 diputados, su peor resultado de la historia, ya que nunca habían bajado de los 33 diputados.
El varapalo que se perfila puede ser interpretado como un primer golpe al ejecutivo de Zapatero, en una tendencia que podría afirmarse el próximo año en el resto de elecciones autonómicas y locales en España hasta finalizar en los comicios generales de 2012.
El conservador Partido Popular (PP), en cambio, mejora su posición logrando 18 legisladores superando sus actuales 14 diputados, con lo que volvería a ser la tercera fuerza política en Cataluña, posición que había perdido hace cuatro años en favor de ERC.
La crisis económica y el fallo del Tribunal Constitucional que anuló algunos artículos del Estatuto de autonomía ampliado, en una región celosa de su autogobierno, ha pasado factura al tripartito saliente.
Más que un ex presidente. La nota de las elecciones la dio el ex presidente del Futbol Club Barcelona, Joan Laporta, quien logró cuatro bancas en el Parlamento de Catalunya -es el más antigüo de toda Europa- con su nuevo partido Solidaritat Catalana per la Independència (SI).
"Hemos entrado en el Parlament para conseguir la independencia", aseguró Laporta, apenas cuatro meses después de crear el partido. Laporta propone que Cataluña sea una nación independiente del Estado español.
