El gobierno argentino se sumó al repudio internacional y condenó el ataque israelí perpetrado en aguas internacionales contra una flotilla propalestina que transportaba ayuda humanitaria para la Franja de Gaza e hizo un llamado al cese de la violencia en Medio Oriente, en un comunicado de la cancillería.
"La República Argentina lamenta profundamente la pérdida de vidas humanas producida en este episodio y efectúa un llamado a que se lleve a cabo una completa y exhaustiva investigación de los hechos ocurridos", señala el parte.
El gobierno de Cristina Kirchner hizo además "un enérgico llamado al cese inmediato de actos de violencia que agravan la situación en el Medio Oriente". Reclamó también "el levantamiento del bloqueo a la población de Gaza, permitiendo la libre circulación de las personas y el ingreso de ayuda humanitaria a la región". "La Argentina urge a la estricta observancia del derecho internacional humanitario y de las resoluciones de las Naciones Unidas conducentes a lograr una paz justa y duradera en la región", agregó el comunicado de la cancillería.
El responsable de política exterior de la ONU, el argentino Oscar Fernández-Taranco, instó hoy a Israel en el Consejo de Seguridad a que acabe el bloqueo "contraproductivo" e "inaceptable" a Gaza, y dijo que si éste no existiera no hubiera ocurrido el ataque a la "Flotilla de la Libertad". Fernández-Taranco intervino en nombre del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en la reunión de urgencia que celebra el Consejo de Seguridad por el ataque, informó la agencia DPA.
Fernández-Taranco reiteró la necesidad de realizar una investigación de los hechos, como pidió horas antes Ban Ki-moon, y recordó que el incidente ocurrió cuando "todos los esfuerzos deberían centrarse en la necesidad de crear confianza y en avanzar las negociaciones entre israelís y palestinos".
También la diplomática brasileña ante la ONU, Maria Luiza Ribeiro Viotti, instó a que se pida de "manera inmediata" la suspensión del bloqueo, a la vez que definió el incidente de "deplorable" y pidió una investigación "independiente" sobre lo sucedido. En la flotilla atacada por Israel se encontraba una ciudadana brasileña.
Por su parte, el canciller turco Ahmet Davutoglu dijo en la ONU que Israel "perdió toda legitimidad internacional" tras el ataque.
La réplica del gobierno israelí. Luego del escándalo mundial, Israel afirmó en la ONU que "no hay crisis humanitaria en Gaza" y acusó a la flotilla de activistas -que intentó entregar víveres a los palestinos- de perseguir otros objetivos.
"A pesar de que los medios de comunicación la presentaron como una misión humanitaria para entregar ayuda a Gaza, esta flotilla no tenía nada de humanitario", dijo el representante israelí ante la ONU, Daniel Carmon. "No eran activistas pacíficos ni mensajeros de buena voluntad. Utilizaron cínicamente una plataforma humanitaria para enviar un mensaje de odio e implementar la violencia", dijo.
El embajador israelí, cuyo país no integra actualmente el Consejo de seguridad de la ONU, fue autorizado a expresarse en la reunión de emergencia convocada tras el mortífero ataque de su país contra la flotilla de activistas. Según Carmon, "no hay crisis humanitaria en Gaza". Agregó que ese territorio "está ocupado por terroristas que expulsaron a la Autoridad Palestina mediante un violento golpe y que introducen armas, incluyendo por vía marítima". "Los resultados de los eventos de anoche son trágicos y desafortunados, e Israel lamenta la pérdida de vidas inocentes", dijo el embajador. "Pero no puede pasar por alto su propia seguridad", advirtió.
Fuentes: AFP y DPA