Una ONG brasileña llevó a la Cámara Alta del vecino país una propuesta para que la Constitución establezca que los derechos sociales son esenciales para ser feliz.
"Son derechos sociales, esenciales a la búsqueda de la felicidad, la educación, la salud, el trabajo, la vivienda, el ocio, la seguridad (personal y social), la protección de la maternidad y la infancia, la asistencia a los desamparados", dice el párrafo que el "Movimiento Más Feliz" espera que se agrege a la Constitución, según consigna el diario La Voz.
Una vez recibida la propuesta, el senador y ex ministro de Educación Cristovam Buarque, del Partido Democrático Laborista (PDT, sigla en portugués), organizó un debate para que se discuta la la idea.
El tema de la felicidad no es nuevo en un parlamento: varios países, como Estados Unidos, Francia, Japón y Corea del Sur incluyeron ya esa palabra en sus constituciones. Es que la “felicidad” es utilizado por muchos países como medidor de bienestar social.
Según explicó a la agencia EFE el senador Buarque, el texto propuesto tiene el objetivo de " humanizar la Constitución, llevando el concepto político (de los derechos) a uno más humano, que coincide con la felicidad", para "concientizar a las personas sobre los derechos sociales".
"El Estado tiene que crear las condiciones esenciales para que las personas sean felices", no sólo para asegurar derechos como la educación o la salud, sino para que "sean de calidad" y el ciudadano pueda "alcanzar la felicidad", agregó.