Un escándalo se cierne sobre el gobernador de Carolina del Sur, Estados Unidos, quien anunció que se iría de vacaciones a las montañas del este de su país y luego desapareció por unos días hasta que se supo que vino de visita a Buenos Aires.
Todo comenzó el pasado jueves 18 de junio, cuando Mark Sanford decidió tomarse vacaciones tras una extenuante sesión legislativa en la que se debatían los destinos de los fondos que el gobierno nacional destinaría a su estado, como parte del paquete de salvataje financiero impulsado por el presidente Barack Obama.
El republicano Sanford intentó rechazar 700 millones de dólares de ayuda financiera, y vetó varias propuestas para gastar ese dinero. Sin embargo, todos sus vetos fueron rechazados. Derrotado, anuncio que pasaría un fin de semana en los Apalaches , una cadena montañosa que se extiende desde el Noroeste de Estados Unidos hasta el estado de Georgia.
Sin embargo, Sanford, quien dice que visita esas montañas desde que era adolescente, se decidió, según sus propias palabras, por un destino "más exótico": Buenos Aires. El gobernador les había avisado a sus asistentes que iría a los Apalaches, pero luego desapareció durante cinco días, sus telefonos quedaron apagados y ni siquiera los oficiales de la gobernación sabían dónde estaba, informó el diario local Post and Courier.
La preocupación comenzó a crecer el lunes, cuando el gobernador de 49 años seguía sin aparecer. Su propia familia desconocía su ubicación, y sus cuatro hijos pasaron el día del padre sin él. Su esposa explicó al Post and Courier que Sanford viajó para relajarse y escribir "un proyecto literario", algo que ya habìa hecho en el pasado.
Sanford reapareció hoy en el aeropuerto internacional de Hartsville-Jackson y explicó a la prensa que cambió de parecer a último momento y decidió viajar a Buenos Aires, donde "manejé por la costa, es una gran ciudad". El gobernador dijo que viajó sólo y se rehusó a dar más detalles sobre el tema: "No entiendo cómo hicieron tanto problema por esto", se quejó al diario The State.
Pocas horas después de reaparecer, y ante la magnitud del escándalo, Sanford convocó una conferencia de prensa y confesó que le había sido infiel a su mujer con una argentina que conoce hace ocho años y con quien comenzó a vivir un amorío en el último año. Sanford no dio el nombre de la mujer.
Si bien la constitución de Carolina del Sur no obliga a los gobernadores a declarar sus viajes, la noticia causó un escándalo, ya que es poco común que un mandatario se ausente por tanto tiempo sin que nadie lo sepa: ni el personal de seguridad del Estado, ni la embajada estadounidense en Argentina estaban al tanto de la visita.
El revuelo se debe a que Sanford es la gran esperanza del Partido Republicano y un posible candidato a la presidencia en 2012. Sus rivales partidarios aprovecharon la ocasión: "No poder comunicarse con la persona que es responsable sobre 4,5 millones de habitantes es preocupante", afirmó Andre Bauer, quien espera competir por la gobernación el año próximo.
El gobernador prometió dar una conferencia de prensa a las 14 (las 15 de Argentina). Pero el escándalo no promete detenerse: hay reportes de que Sanford no estuvo sólo durante su viaje. Peor aún, un ex prostituto y actual personal trainer, Mike Jones, asegura que pasó el fin de semana con el gobernador, aunque en el estado de Colorado.