Con el féretro cargado por ocho húsares, el cuerpo del líder venezolano Hugo Chávez dejó la capilla ardiente y recorrió las calles de Caracas hasta un simbólico cuartel, en el último adiós al fallecido mandatario a un mes de las elecciones para elegir a su sucesor.
En el patio de la Academia Militar, por la que durante nueve días y noches desfilaron cientos de miles de venezolanos para despedir a su líder, que perdió la batalla contra un cáncer tras 14 años en el poder, fueron sus hermanos y principales colaboradores los que cargaron el féretro por un corredor dejado por dos formaciones de 2.000 cadetes que entonaron el "Patria Querida", hasta que fue introducido en el coche fúnebre con la bandera venezolana.
El cortejo fúnebre empezó a avanzar por el engalanado Paseo de los Próceres, escoltado por jinetes, ante la atenta mirada de las miles de personas que se acercaron para verle desde las primeras horas de la mañana.
Una misa y una ceremonia solemne encabezada por el presidente interino de Venezuela, Nicolás Maduro, y la familia de Chávez, en el salón de honor de la Academia Militar, habían dado inicio al acto que culminará con la llegada del féretro al Cuartel de la Montaña, en la barriada del 23 de enero, un bastión chavista en el oeste de Caracas.
"Gracias comandante por devolvernos la patria", expresó la segunda hija de Chávez, María Gabriela, en un mensaje ante el féretro, leído después de que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, dijera que el mandatario "se convirtió en un presidente ejemplar, el único que se acordó de los pobres".
"Yo vine porque es nuestro presidente. El mejor homenaje que le podemos hacer es seguir batallando por nuestra revolución y estar alegres, no tristes", dijo Judith Santana, una abogada de 51 años, en las gradas del Paseo de los Próceres, entre miles de seguidores, muchos de ellos vestidos con camisetas rojas con el rostro del mandatario y el brazalete con los colores de la bandera venezolana.
El recorrido de 12 kilómetros por las grandes avenidas de Caracas ha movilizado una gigantesca multitud, al igual que el cortejo que trasladó durante siete horas el féretro del mandatario a la Academia Militar desde el Hospital Militar, donde falleció el martes 5 de marzo, pocos días después de regresar de La Habana.
También desde la mañana, centenares de personas se habían concentrado frente al cuartel, convertido en Museo Histórico Militar, a esperar la llegada del féretro. "Es un orgullo para nosotros que nuestro comandante esté aquí, él siempre fue de aquí", explicó a la AFP Carmen González, vecina del 23 de Enero.
¿Embalsamado? Dos días después de la muerte de Chávez, Maduro anunció que el líder venezolano sería embalsamado para que los venezolanos pudieran ver a su líder "para siempre", pero el miércoles rectificó y admitió que será "bastante difícil" hacerlo, pues el procedimiento debería haber comenzado "mucho antes".
"Tengo la responsabilidad máxima de informar estos pasos para que todo el mundo sepa que hay dificultades, que pudieran impedir que se haga lo que se hizo con Lenin, Ho Chi Minh o Mao Tse Tung", añadió Maduro, recordando las figuras con las que comparó a Chávez, que murió víctima de un cáncer.
También sigue la duda de si a la larga el cuerpo de Chávez descansará en el Panteón Nacional, junto al histórico libertador Simón Bolívar, a quien el fallecido mandatario admiraba. El oficialismo postergó el martes un debate en el Parlamento para proponer una enmienda a la Constitución que lo haga posible. Según la Carta Magna, se tienen que esperar 25 años para que un fallecido pueda ocupar esa ilustre edificación, informó la Agencia France Press (AFP).