Washington - El precandidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, obtuvo el triunfo en la primaria de Oregon, con lo cual se aseguró la mayoría de delegados elegidos a la Convención del partido, mientras su rival Hillary Clinton lo derrotó en Kentucky y dijo que no se rendirá.
Si bien los resultados del martes no le permiten defvinir la nominación, Obama superó la barrera de la mayoría en materia de delegados simples, los que fueron directamente escogidos por los electores, y ahora circunscribe la batalla a la puja por los llamados superdelegados, figuras del Partido Demócrata con derecho a voto en la Convención. Las cadenas de televisión de Estados Unidos le dieron a Obama la victoria en Oregon, un estado del noroeste norteamericano que aporta 52 delegados a la convención.
Por su parte, esas mismas cadenas proyectaron que Clinton ganó ampliamente en Kentucky tal cual lo esperado, gracias a su base de trabajadores y mujeres mayores. Los resultados oficiales confirmaron la victoria, con el 65% de los votos, contra el 30% de Obama. Kentucky otorga 51 delegados según representación proporcional.
Ante sus seguidores, en el estado de Iowa, donde hace medio año abrió su carrera hacia la Casa Blanca, Obama proclamó: "volvimos a Iowa con una mayoría de delegados elegidos por el pueblo estadounidense, y nos han dejado al alcance de la nominación demócrata a la Presidencia de los Estados Unidos de América".
"Está claro que esta noche hemos alcanzado un 'gran hito' en esta aventura", agregó. Según el sitio independiente RealClearPolitics.com, el senador por Illinois contaba antes de los comicios en Oregon y Kentucky con 1.610 delegados, sobre un total de 3.253 que asistirán a la Convención Demócrata ente el 25 y el 28 de agosto. Clinton disponía de 1.443 delegados.
La campaña de Obama afirmaba que necesitaba sólo 17 delegados más para alcanzar la mayoría de 1.627 y proclamarse vencedor de la interna demócrata, sin contar a los 'superdelegados', aquellos que tienen libertad para dar su voto por el candidato de su preferencia.
Con los 'superdelegados', el número para lograr la nominación demócrata es de 2.025. Según , Obama tiene en conjunto 1.897 delegados y Clinton 1.717.
Consultada sobre si abandonaría su candidatura el martes en la noche, Clinton respondió que no había "ninguna chance" de que ello ocurriera. Y horas después, al celebrar el triunfo en Kentucky, agregó que "esta es una de las contiendas más cerradas por una nominación partidaria en la historia reciente. Estamos ganando el voto popular y estoy más decidida que nunca a hacer que cada voto sea emitido y que cada papeleta sea contada".
Hay un detalle que marca hacia donde se inclina la lucha demócrata: el equipo de campaña republicano ya se comporta como si Obama fuera el candidato demócrata y ha comenzado a endurecer sus críticas contra el senador por Illinois, al que fustigó el martes por su postura ante Cuba y acusó el lunes de subestimar la amenaza que supone Irán.
Fuente: AFP