Hillary Clinton y Barack Obama, los dos principales aspirantes a la candidatura presidencial por su Partido Demócrata, intercambiaron anoche algunos de los ataques más duros de la campaña en un debate en el que se acusaron mutuamente de distorsionar la verdad con fines políticos.
Clinton y Obama se dirigieron duras palabras haciéndose eco de varios roces casi personales que sus campañas mantuvieron en los últimos días. La gran diferencia es que fueron ellos en persona, en lugar de, como hasta ahora, algunos de sus colaboradores.
"Es muy difícil tener un debate serio contigo porque nunca asumes la responsabilidad", afirmó irritada Clinton. Después de los abucheos del público, Obama incluso sugirió que la senadora es capaz de cualquier cosa para ser la elegida.
La tensión fue evidente. Obama dirigió numerosas miradas desafiantes a Clinton. La ex primera dama, por su parte, escuchaba al senador por Illinois apoyada en su atril y con una sonrisa irónica.
"A veces es difícil entender lo que dice el senador Obama, porque tan pronto como se le pregunta por ello, dice que no es lo que quería decir", acusó Clinton.
"Hay una serie de afirmaciones hechas por la senadora Clinton, así como su marido, que no se atienen a los hechos", contraatacó Obama, que equiparó a Hillary y Bill Clinton con "la misma política típica que hemos visto en Washington".
El aspirante afroamericano de 46 años, que en los últimos días respondió abiertamente a los ataques del ex presidente Clinton, agregó que "a veces no se sabe contra quién estoy compitiendo".
Obama acusó también a la senadora Clinton de "estar sentada en el consejo de administración" de los supermercados Wall-Mart mientras él estaba luchando por los derechos de los trabajadores frente al gobierno de Ronald Reagan.
La senadora respondió recordando cómo Obama trabajó para un empresario de dudosa reputación cuando era abogado en Chicago.
Carolina del Sur, donde se celebrarán las primarias demócratas el sábado, se plantea como un estado clave en la lucha entre Clinton y Obama. Tras los triunfos consecutivos de Clinton en New Hampshire y Nevada, Obama confía en contar con el apoyo de la población negra del estado, que representa la mitad del total.
Según la media de las encuestas realizada por el sitio web especializado RealClearPolitics.com, Obama aventaja a Clinton por unos diez puntos (42 a 32 por ciento).
En la que fue casi su única coincidencia, l os aspirantes dieron por hecho que el senador John McCain será el candidato elegido por el partido republicano para las elecciones del 4 de noviembre. McCain encabeza las encuestas republicanas después de triunfar en New Hampshire y Carolina del Sur.
Fuente: Telam