El candidato de la oposición Porfirio Lobo vencía esta noche con holgura a su oponente oficialista Elvin Santos en las elecciones presidenciales de Honduras, con las que se intenta poner fin a la crisis desatada por el golpe de Estado que depuso al mandatario Manuel Zelaya.
Postulante del derechista Partido Nacional aunque con un pasado como militante comunista, el carismático Lobo lideraba con 55,9% y más de 17 puntos de luz los comicios cuando se habían computado casi dos tercios de los votos, según datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
De acuerdo con el mismo ente, el nivel de participación fue del 61,3% y por ende superior al de las elecciones pasadas en las que fue ungido Zelaya, quien llamó a la abstención y calificó de "ilegítimos" estos comicios.
Así, el gran perdedor de estos comicios ha sido el mandatario derrocado, quien denunció que el régimen de facto "infló" los resultados de la elección para "convertirla en una mentira para los hondureños".
Zelaya, quien fuera electo por el Partido Liberal pero a poco de asumir viró a la izquierda con algunas medidas que motivaron su desplazamiento, hizo esas declaraciones desde la embajada brasileña en Tegucigalpa, donde sigue recluído luego de haber sido obligado a abandonar el país por los militares que lo depusieron.
En el cómputo de este domingo Lobo aventajaba en más de 280.000 votos a su rival Elvin Santos, del oficialista Partido Liberal (PL,derecha), que obtenía 38,60% según datos que todavía deben ser verificados ya que el sistema informático sufrió un problema técnico según el titular del TSE, Saúl Escobar.
Unos 4,6 millones de electores -de ellos cerca de un millón en el extranjero- fueron convocados a las urnas este domingo para elegir al futuro presidente, renovar el Congreso y los gobiernos locales en un ambiente de crispación y división política, como consecuencia lógica del golpe militar que puso fin intempestivamente al gobierno de Manuel Zelaya y la falta de un entendimiento entre el mandatario depuesto y sus sucesores.
Fuente: AFP.