A fines de agosto, el diario Perfil dio a conocer la historia de Daniela Cott, una joven argentina que se ganaba la vida como cartonera y hoy brilla en las pasarelas locales. Pero ese no es el único caso de una chica que abandona una labor asociada con lo masculino para dedicarse de lleno al modelaje.
La soldado británica Kayleigh Thewlis estuvo en la primera línea de fuego de Irak. Sus tareas iban desde engrasar tanques a destruir la artillería enemiga. Pasó allí seis meses hasta que decidió dejar el desierto de Basora y aterrizar en las pasarelas londinenses.
Según informa el Daily Mail, el primer paso de la voluptuosa rubia fue lograr la portada de una revista de moda. Para lograrlo, la soldado envió una carta acompañada por fotografías a los editores de Scarlet.
Su estrategia fue un éxito. No dudaron en dedicarle la portada. A partir de ese momento, las ofertas comenzaron a llegarle por docenas.
Ahora, con un pie en el mundo de la moda, la muchacha no tiene reparos en espantar las fantasías que despierta su pasado en las trincheras.
Según informa el sitio 20minutos.es, Thewlis aseguró en una entrevista que si bien " se puede pensar que ser una mujer joven en el ejército británico es el sueño de toda mujer, con hombres calientes cerca las 24 horas al día", no es su caso, porque ella es " una ingeniero de mantenimiento de tanques" que pasa sus días " cubierta en aceite".
Además, reveló que sus compañeros de tropa la tratan "como a uno más". ¿Habrán visto sus fotos?