ANSA/AP
Desde Pretoria
El intérprete de lenguaje de señas para sordomudos del servicio religioso de Nelson Mandela, que según la Federación de Sordos de Sudáfrica es “falso”, fue acusado de asesinato en 2003, informó ayer el canal de televisión local eNCA.
Thamsanqa Jantjie, quien está recibiendo tratamiento para la esquizofrenia, también fue acusado anteriormente de los delitos de violación en 1994 y asaltos a viviendas en 1995 y 1997, y secuestro en 2003, año en que también fue denunciado por asesinato, según informa el mismo medio.
El supuesto intérprete, de 34 años, argumentó que sufrió un episodio esquizofrénico que lo distrajo durante las traducciones de las intervenciones de los jefes de Estado en el oficio religioso de Mandela en Johannesburgo el pasado martes.
Según eNCA, muchos de los cargos a los que se enfrenta fueron retirados tras alegar que sus problemas mentales le impedían ser juzgado. Jantjie fue absuelto de la acusación de violación, pero fue declarado culpable de robo, por el que fue condenado a tres años de prisión, aunque no está claro si cumplió la condena.
Documentos judiciales revelan que el asesinato, el intento de asesinato y el secuestro del que fue acusado junto a otras personas en 2003 fue remitido al Tribunal Superior de Gauteng en 2004 y concluyó en noviembre de 2006, aunque el expediente judicial está vacío.
Jantjie se ha negado a comentar lo que pasó con el caso, mientras que la Fiscalía Nacional dice que no puede confirmar o negar la existencia de estos cargos contra Jantjie, indica la televisión sudafricana.
La ceremonia de homenaje a Mandela dejó indignados a los sordomudos de Sudáfrica que hoy denunciaron al intérprete de los discursos como “un impostor”, ignorante del lenguaje de signos.
“Es un impostor”, dijo el director de desarrollo para el lenguaje de signos de Ciudad del Cabo. “La comunidad de sordos de Sudáfrica está ofendida”, declaró por su parte Delphin Hlungwane, intérprete oficial de la Federación de Sordos de Sudáfrica.
“Movía sus manos en todos los sentidos. No tenía ninguna gramática, no utilizaba ninguna estructura, no conocía ninguna regla de la lengua”, dijo Hlungwane.