Cuando Máxima Zorreguieta se casó con el príncipe Guillermo-Alejandro (Williem-Alexander Claus George Ferdinand van Oranje-Nassau), allá por febrero de 2002, una fantasía era posible: una argentina podía convertirse en Reina de Holanda. Hoy, aunque todo aún parezca un poco inverosimil, ese sueño estaría por convertirse en realidad.
Es que Beatriz, la actual dueña del trono, estaría por legarle su lugar a su hijo Guillermo, de 42 años, justo el día que se festeja el Día de la Reina en Holanda (el 30 de abril). En caso que ello sucediera, la hija de Jorge Zorreguieta y María del Carmen Cerruti se convertiría en reina consorte en el país de los tulipanes.
De acuerdo a rumores que corren por los pasillos de la realeza local, Beatriz, de 71 años, no quiere que su hijo tenga que vivir la suerte de Carlos de Inglaterra, quien a los 60 años aún espera que su madre Isabel deje el trono. De esta manera es posible que la Reina de Holanda (una de las más queridas de Europa) le ceda antes de morir su lugar a Guillermo
Otras de los rumores se basan en que dos palacios de la familia real acaban de ser reformados: uno sería Drakensteyn, donde viviría la "reina jubilada" (que pasaría a ser la Reina Madre) y otro sería el Paleis op de Dam, donde sería la coronación del príncipe Guillermo como rey y de la princesa Máxima como reina consorte.
Sin embargo desde distintos medios holandeses aseguraron que la abdicación de Beatriz no se dará la próxima semana. La prensa especializada en la Familia Real contó que la actual reina no sólo no tendría intenciones de "jubilarse", sino que tampoco querría dejar el Reino en plena crisis financiera internacional. De este modo, Máxima tendría que seguir esperando como princesa.
