El gobierno venezolano desestimó hoy la posibilidad de que el presidente Nicolás Maduro sea revocado mediante un referendo este año, tras decretar un estado de excepción que según analistas busca cerrarle el paso a la consulta impulsada por la oposición.
Aristóbulo Istúriz, vicepresidente ejecutivo de la república, sostuvo durante un acto callejero en Caracas: "Aquí Maduro no va a salir por referéndum", según informó la agencia AFP.
El funcionario aclaró: "Primero porque lo hicieron tarde, segundo lo hicieron mal y tercero cometieron fraude".
Por su parte, el líder opositor Henrique Capriles había advertido el sábado sobre un estallido social si el gobierno impedía el revocatorio contra Maduro este año.
Bajo el estado de excepción, el jefe de Estado ordenó el sábado tomar las fábricas improductivas, estrategia que analistas atribuyen a un líder acorralado.