Pena de muerte para uno de los terroristas del maratón de Boston

Agencias
Boston
Pese a la oposición de algunas de las víctimas y de la prensa, Dzhokhar Tsarnaev, el joven acusado por el atentado al maratón de Boston hace dos años, fue condenado ayer a muerte por la Justicia de los Estados Unidos, imputado por la muerte de tres personas y por provocar heridas a más de 250.
La sentencia fue leída en una sala de la Corte Federal de Boston en presencia de Tsarnaev, después de que los integrantes del jurado permanecieran 14 horas reunidos. Los 12 miembros del jurado, siete mujeres y cinco hombres, se presentaron ante el juez federal George A. O’Toole Jr, encargado del caso, quien les preguntó cuál era el veredicto. El jurado plasmó su decisión unánime en un documento de 24 páginas en el que desglosaron los treinta cargos que le imputaron a Tsarnaev. Al anunciarse la pena capital, no hubo una reacción visible por parte de Tsarnaev. En la sala se encontraban familiares de fallecidos, entre ellos el padre de Martin Richard y la hermana de Sean Collier, así como víctimas, como Karen Brassard y Liz Norden.
En abril pasado, cuando el jurado declaró a Tsarnaev culpable de todos los cargos, las deliberaciones se extendieron durante dos días. Entonces, Tsarnaev fue considerado responsable de las tres muertes que causaron las dos bombas caseras que colocó junto a su hermano en la línea de meta del maratón de Boston, así como de la muerte del policía del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) Sean Collier. Los Tsarnaev dieron muerte al uniformado durante una persecución en la que lanzaron explosivos y se tirotearon con las fuerzas de seguridad, en una ciudad paralizada por el horror y por un toque de queda de 24 horas.
La pena capital contra Tsarnaev había sido solicitada a nivel federal, ya que fue abolida en el estado de Massachusetts en la década de 1980, de forma que será ejecutado en otro estado. La acusación describió al joven de 21 años de origen checheno como un “terrorista sin remordimientos que merece morir”. La defensa, en tanto, lo pintó como un “niño perdido”, manipulado por su hermano mayor, Tamerlan, abatido por la policía durante el operativo en el que Dzhokhar fue detenido.
La pena de muerte podría ser apelada por los abogados de Tsarnaev, medida que podría alargar por diez años el suplicio del acusado. Los familiares de Martin Richard y el influyente diario The Boston Globe se habían manifestado en contra de una sentencia de este tipo, pedido que fue desoído por el jurado.