En lo que se presume sería un atentado concretado por la organización terrorista vasca ETA, un coche bomba estalló este jueves frente a un cuartel de la Guardia Civil de Durango, en la provincia española de Vizcaya, e hirió levemente a un agente que patrullaba el lugar.
El vehículo se encontraba estacionado enfrente del cuartel, por lo que la explosión no llegó a provocar daños en el interior del destacamento ni víctimas de gravedad.
La organización guerrillera había anunciado en junio pasado su decisión de levantar el alto el fuego decretado en marzo de 2006 y atacar nuevamente "en todos los frentes".
Justamente este jueves, el ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, había declarado en una entrevista radial para la Cadena SER que ETA no producía ataques en los últimos tiempos porque el gobierno español viene trabajando “mucho y bien” para que ello no ocurriera.
En el reportaje, además, Pérez Rubacalba anticipó que el silencio de Batasuna (brazo político de ETA) “es el peor de los augurios”, pero que si ETA volvía a atacar les iría “muy mal a los dos”.
